“Lo esencial es invisible a los ojos”, también en tecnología.
El mercado de tecnología tiene una dermis muy gruesa, que aparentemente no permite ver algunas jugadas estratégicas que se están dando en el mercado, son obvias pero nadie habla de ellas. Seguramente El Principito jamás imaginó que terminaría siendo un gurú tecnológico del siglo XXI, y que sus delicadas enseñanzas, terminarían siendo aplicadas a mercados…