Entre los e-migrantes y los androides, el 2025 ha dado muestras de tendencias laborales interesantes.
Ello sin contar el impacto que la Inteligencia Artificial generativa (GenIA) y los agentes de IA están generando en el trabajo cotidiano.
Por: Roberto Alfaro | Gerente General SCM Latam
Abordar los retos de un entorno en constante cambio y transformación, donde la tecnología, el bienestar y la adaptabilidad sean clave para el éxito de las empresas y organizaciones. Este es el foco actual de las tendencias laborales.
En ese marco, destaca el desarrollo de directores y gerentes, centrados en fortalecer el liderazgo existente.
Tal enfoque busca abordar las carencias en talentos claves, promoviendo la formación de nuevos agentes de cambio con habilidades para liderar equipos adaptados a la tecnología, así como el balance entre la vida personal y profesional.
Estos líderes son pilares fundamentales para guiar a los equipos en un panorama cada vez más complejo y cambiante. Su rol no solo debe centrarse en obtener resultados, sino también en retener y motivar el verdadero talento dentro de sus equipos para alcanzar objetivos de más largo plazo.
Cambios en curso
Por otra parte, la implementación de modelos laborales híbridos y flexibles también está marcando la pauta hoy.
Cada vez son más los trabajadores que buscan opciones de trabajo híbrido, que les permita encontrar un equilibrio entre su vida profesional y personal, al tiempo que se adaptan a nuevas dinámicas laborales.
Otra área crítica es la gestión del cambio, en la cual la capacidad de adaptación frente a nuevas tecnologías, transformaciones organizacionales y dinámicas laborales será indispensable.
Todo ello se conecta, directamente, con la tecnología en Recursos Humanos, ya que herramientas avanzadas como la automatización y la Inteligencia Artificial (IA):
- Optimizarán procesos
- Mejorarán la experiencia del empleado
- Y facilitarán la toma de decisiones basada en datos
Finalmente, el bienestar y la salud mental de los empleados ocuparán un lugar central en el actual periodo.
Las organizaciones deberán integrar estrategias que permitan equilibrar el rendimiento con la salud física y emocional de sus equipos.
De esa manera, reconocen que el éxito empresarial está estrechamente vinculado al bienestar de sus colaboradores.