En medio del tornado que ha generado la Inteligencia Artificial, algunos impactos están pasando debajo de la mesa como el que tiene sobre la reputación.
La mayoría de las empresas da por sentado los trabajos de marca e inbound que han realizado por años, olvidando el peso que Internet tiene tanto en la gestión de imagen como en la percepción general de las personas.
Ya sea entusiasmo, dudas o abierta preocupación por cómo y dónde desplegarla, la mayoría de las conversaciones empresariales giran en torno a la Inteligencia Artificial.
Además, ya desde comienzos de año se ha adelantado que la IA Agéntica y su correlato, la Conversacional, desplazarán a la GenIA en los próximos meses.
No obstante y aunque ya desde hace algún tiempo se anticipó el impacto que la Inteligencia Artificial podría tener en el mercado de buscadores, se ha puesto poca atención en el impacto sobre la reputación.
De hecho, solo los medios de comunicación se dieron cuenta de lo que podía representar que las búsquedas fueran sustituídas por respuestas, mas bien narrativas, en lenguaje natural.
“Aunque aún es incierto el impacto total de la IA en el tráfico orgánico hacia sitios web, las proyecciones apuntan a una disminución significativa”, resaltó la experta en branding estratégico, Daniela Buján.
Cambio de paradigma
La especialista aseguró que más del 90% de las empresas en América Latina no están preparadas para el cambio que está marcando la Inteligencia Artificial (IA) en la manera en que los consumidores buscan información y toman decisiones.
Y es que, a medida que los usuarios buscan respuestas más directas y personalizadas, las IAs conversacionales están tomando un rol protagonista.
Así, cada día aumenta el número de usuarios que migran hacia plataformas de IA conversacional como ChatGPT, Gemini, Copilot o Google SGE (Search Generative Experience), prescindiwndo de los buscadores tradicionales.
Dichas plataformas ofrecen respuestas rápidas y adaptadas a las preguntas de los usuarios, priorizando tanto recomendaciones como soluciones que, en ocasiones, desplazan a los resultados típicos de búsqueda.
“Es crucial monitorear y optimizar nuestra imagen en estas plataformas, ya que los consumidores están migrando de Google a ChatGPT”, precisó Daniela Buján, experta en branding digital y estratégico.
Destacó que estas plataformas no solo responden a las búsquedas de los usuaruos sino que, además, pueden brindar recomendaciones, actuando como “un influencer muy potente”.
Datos para el cambio
Lo cierto es que la introducción de las distintas aplicaciones/plataformas de apoyo educacional inteligencia artificial ya están mostrando su impacto a sobre el acceso a Internet.
El cambio gradual de paradigma está generando una caída en la interacción directa con sitios web de forma medible. Así, Search Engine Land estiman escenarios de pérdidas de:
- Entre el 18% y el 24% del tráfico orgánico
- Mientras que desde Brandignity, el descenso podría alcanzar el 30%
Lo que sí se sabe es que el 65% de los consumidores afirmó estar abierto a recibir recomendaciones directamente de IA conversacionales.
Ello exige que las marcas adapten sus estrategias de contenido para aparecer en las respuestas de estas plataformas.