Cada 23 de abril se celebra el día mundial de una tecnología que parece sobrevivir a los cambios actuales: el libro.
¿Sabía usted que los dispositivos electrónicos y las redes sociales están revitalizando el hábito de la lectura?
Probablemente lo mejor de celebrar el Día Mundial del Libro durante este 23 de abril es que descubrimos, a pocos días de la muerte del Nobel peruano Mario Vargas Llosa, que estos no sólo no han desaparecido sino que se han diversificado.
Gracias a internet los eBooks siguen en aumento, los audiolibros se han convertido en una forma de vida para algunos youtubers y, lo más importante, los libros físicos se siguen vendiendo. Mucho.
De hecho, cifras de Statista señalan que América Latina es una de las regiones en las cuales la venta de libros físicos tienen vigencia.
Eso explica porque los grandes eventos editoriales en Monterrey, Bogotá o Buenos Aires siguen convocando tanto a multitudes como a talentos.
Las cifras del portal estadístico alemán señalan que:
- 46% de los encuestados en México y Perú compraron al menos un libro en los doce meses previos al sondeo
- Le siguen los lectores de Chile con 43%
- Argentina con 42%
- Mietrad que en Brasil y Colombia los porcentajes alcanzan el 40%
Contra todo pronóstico
Quizás lo más impresionante de la sobrevivencia y el éxito del libro es que, sin duda, la la era digital privilegia al video.
Lo cierto es que el mayor vendedor de libros del mundo, Amazon, ha señalado que los dispositivos eléctricos y las redes sociales están transformando el acto de leer en una experiencia completamente nueva, más social, accesible y, sobre todo, popular. Quien lo diría.
Sin duda, Kindle de Amazon, como dispositivo pionero, ha tenido mucho que ver en este proceso de readaptación.
Tampoco dudamos de que todo lo que se puede hacer en los dispositivos electrónicos ha favorecido esta evolución:
- Su capacidad para almacenar bibliotecas enteras en un dispositivo ligero y compacto
- Las pantallas a color
- O escribir notas a mano
Todas estas funcionalidades han eliminado barreras que, durante siglos, limitaron el acceso a la literatura.
A la vez, ofrecen funciones de accesibilidad para usuarios con diversas necesidades como opciones para ajustar el tamaño de fuente, el espaciado y el contraste. También tienen funciones de texto a voz; compatibilidad con lectores de pantalla; y de lectura asistida para las apps Kindle.
Los datos tanto de Kindle destacan que las nuevas generaciones han transformado la lectura de una actividad solitaria a un elemento central de su identidad y estilo de vida.
El fenómeno trasciende el mero acto de leer para convertirse en una estética, una comunidad y una forma de expresión personal.
Un nuevo tipo de experiencia
Por ello, las proyecciones indican que el mercado mundial de ebooks continuará su expansión hasta alcanzar 1.100 millones de usuarios para 2027. Además:
- Se estima que en 2026 la facturación de este sector alcance los US$ 15.140 millones.
- 34% de la Generación Z
- Y 23% de los millenials descubren nuevos libros a través de las redes sociales
Según el informe de Amazon, Facebook, YouTube, X (antes Twitter), Instagram y TikTok han impulsado el entusiasmo por la lectura entre la Generación Z y los millenials.
De esta manera se han creado espacios de divulgación, discusión y encuentro que el libro tradicional nunca tuvo a su disposición.
Gracias a todo ello, los e-readers, particularmente Kindle, han dejado de ser simples dispositivos para convertirse en accesorios personalizables que reflejan la individualidad de sus propietarios.
Muestra de ello es el que la comunidad #KindleGirlies ejemplifica esta transformación: decorar los dispositivos con pegatinas, pop sockets y fundas personalizadas es una forma de pertenencia a una cultura literaria más amplia.
Fenómenos como “Día de Rellenar tu Kindle” (jornadas de compra colectiva de libros digitales) demuestran cómo los rituales de lectura se han integrado en la vida cotidiana de la generación Z.
Por otro lado, comunidades como Pottermore y la que se ha generado en torno a los libros de Déborah Harkness son una muestra de cómo los clubes de lectura ha sido ampliamente superados gracias a Internet y todas las posibilidades de la era digital.