El buque colombiano de combate ARC Nariño llegó recientemente a su país tras desafiar 11.000 millas náuticas de viaje bajo severas condiciones climáticas. La embarcación fue comisionada por la marina colombiana en Corea del Sur, y gracias al proveedor líder de servicios globales de comunicaciones móviles por satélite, Inmarsat, y su sistema insignia de comunicaciones marítimas, FleetBroadband, fue capaz de enfrentar los tifones y huracanes que encontró en su trayectoria y navegar con seguridad hasta Colombia sin perder nunca la conectividad de voz y datos.
En concreto, el servicio FleetBroadband de Inmarsat proporcionó al ARC Nariño una cobertura confiable de voz y de banda ancha de datos sin problemas durante las 11.000 millas náuticas que separan el puerto de Jinhae, en Corea del Sur, y la Bahía Málaga, situada en el Pacífico colombiano.
El viaje estuvo marcado por las inclemencias del tiempo, particularmente graves y muy seguidas entre sí. Entre las adversidades que se encontró el navío están el tifón Halong, hallado frente a las costas de Filipinas, y el huracán Odile, que está calificado como el ciclón tropical más intenso entre los que han impactado la península de Baja California durante la era moderna.
El sistema FleetBroadband de Inmarsat jugó un papel decisivo en la seguridad del buque y aseguró que las comunicaciones externas fuesen confiables durante el viaje. Los servicios ininterrumpidos de voz e Internet del sistema de comunicación por satélite también permitieron una interacción constante entre los miembros de la tripulación y sus familias, incluso cuando el buque navegaba por puntos remotos del Océano Pacífico. El acceso permanente de la unidad a sitios web de Internet permitió el monitoreo constante de las condiciones climáticas, lo que hizo que la tripulación pudiese tomar decisiones oportunas de navegación.