El fintech y las empresas derivadas son, para Finero, fundamentales para entender la transformación digital presente y futura.
Decir que la aceleración del proceso de digitalización ha tocado a todas las industrias y la de una u otra manera deja por fuera el hecho de que pocos sectores han sido más desafíados que el sector financiero, en su conjunto.
Después de todo, el comercio electrónico en los últimos dos años ha sido apalancado por la eficiencia de los pagos digitales, al punto de impulsar tanto la bancarización en el sector tradicional como la adopción de soluciones fintech.
Y esto al mismo tiempo, tanto en colaboración como en paralelo.
Para Nick Grassi, Co-CEO de Finerio Connect, startup mexicana de Open Banking la transformación digital ha acelerado el crecimiento de nuevos jugadores disruptivos y con soluciones innovadoras como:
- Los neobancos
- Las fintech
- Las wallets digitales
- Y hasta las criptomonedas
“El mundo está cambiando y así también lo están haciendo las preferencias y necesidades de los usuarios de los servicios financieros. Al sector han llegado nuevos jugadores que con su innovación están revolucionando lo que conocíamos de la industria”, destacó el emprendedor.
Tiempo de fintechs según Finero
Tanto la banca tradicional como estos nuevos jugadores han tenido que evaluar y/o implementar nuevas tecnologías y herramientas en sus procesos como:
- Inteligencia artificial
- Blockchain
- Big data
- Soluciones en la nube…
… entre otras, para satisfacer las necesidades de sus usuarios y diseñar nuevos productos, servicios y canales.
El Co-CEO de Finero señala que, desde la osicion de su empresa proveyendo soluciones a más de 65 de los bancos, neobancos y fintech más importantes de la región, estas son las tres tendencias que están revolucionando al sistema financiero en América Latina en este momento:
1. Open Banking
Este modelo – también conocido como banca abierta – permite que los clientes de instituciones financieras puedan compartir su información con otras entidades, impulsando el desarrollo de mejores productos y servicios en beneficio de los usuarios.
Sin embargo, los favores del Open Banking no son exclusivos de los clientes. Por medio de este modelo, las instituciones financieras pueden tener una visión de 360 grados del usuario.
Las empresas, con la autorización de los clientes, pueden capitalizar los datos para convertirla en servicios y productos diseñados a la medida del consumidor.
2. Finanzas descentralizadas
Este modelo, conocido como DeFi, por sus siglas en inglés, está integrado por aplicaciones descentralizadas construidas en blockchain, activos digitales, contratos inteligentes, entre otros protocolos.
Las finanzas descentralizadas buscan cambiar los productos financieros tradicionales por un sistema más transparente, más seguro, sin intermediarios y abierto.
Por medio de estas plataformas se pueden realizar operaciones, solicitar préstamos o el intercambio de divisas.
Entre las características del DeFi también se encuentra la posibilidad de construir herramientas y desarrollar, crear o adaptar servicios financieros.
3. Wealthtech
Este concepto se refiere a una generación de empresas de tecnología cuyo principal propósito es desarrollar soluciones para gestionar el patrimonio y realizar inversiones.
El modelo contempla servicios automatizados impulsados por machine learning para aconsejar a los usuarios en sus inversiones y obtener los mejores rendimientos.