La nueva normalidad, y la explosión del trabajo remoto, obliga a un repensamiento en el diseño de los edificios. Ahora deben poseer la infraestructura interior para permitir la implementación de sistemas de red y garantizar la conectividad.
La pandemia cambió la perspectiva ddl mundo hacia los edificios conectados. En 2020 estar siempre conectados pasó de ser una frivolidad a ser una necesidad. Por lo que, la forma en la que concebimos el diseño de los edificios de hoy debe cambiar, y adaptarse a las demandas de la nueva normalidad.
Así pues, hay que elaborar nuevos modelos en la forma en la que diseñamos los edificios conectado. La idea es unificar el control, la administración de sus capacidades y garantizar la conectividad, para lograr beneficios y ahorros, tanto energéticos como operativos. Adicionalmente, son más seguros ya que sus redes pueden ser centralizadas y sus servidores protegidos por hardware y software, sin intervención de personal ajeno al edificio.
Adicionalmente, el alquiler de los espacios en el edificio conlleva los beneficios inherentes de un espacio conectado, como acceso a internet inalámbrica y cableada, seguridad con monitorización remota y hasta conexión directa con los organismos de prevención. Lo cual garantizará al arrendatario la salvaguarda de sus bienes.
Los edificios conectados exigen infraestructura robusta
Esta infraestructura ayuda a los propietarios, operadores y gerentes del edificio a mejorar la confiabilidad y el rendimiento de los bienes lo cual reduce el uso de la energía, optimiza los inconvenientes de espacio y reduce el impacto ambiental del edificio.
Contrariamente a lo que se piensa, y gracias a los avances tecnológicos, las implementaciones de este tipo de estructuras resultan en diseños confiables, económicos a largo plazo, y adecuados a su rol en la nueva normalidad.
Un edificio conectado utiliza procesos automatizados para controlar automáticamente las operaciones del edificio como:
- Calefacción
- Ventilación
- Aire acondicionado
- Luz
- Seguridad
- Otros sistemas.
IoT como nueva oferta
Proporcionar la infraestructura interior necesaria para implementar sistemas completos de red puede ser un argumento atractivo para arrendatarios y compradores.
Muchos edificios modernos incorporan redes Wi-Fi para su personal, arrendatarios y visitantes. Al permitir que los dispositivos se conecten inalámbricamente a un sistema de control centralizado las empresas pueden aprovechar fácilmente las capacidades emergentes de la Internet de las Cosas (IoT).
Tener capacidad inalámbrica ayuda a las organizaciones a dirigir sus iniciativas IoT permitiéndoles administrar todas las comunicaciones machine-to-machine (M2M) en la red empresarial.
Como resultado, la capacidad inalámbrica juega un papel cada vez más relevante. Las áreas de cubrimiento en interiores para antenas Wi-Fi direccionales son de 30 a 100 metros.
Tanto la distancia del usuario de la antena Wi-Fi con frecuencias no licenciadas y los obstáculos dentro como la estructura de los edificios (por ejemplo: cemento, ladrillos, etc.) pueden interferir con las señales de radio, todo afecta el ancho de banda de las comunicaciones recibidas desde la antena Wi-Fi.
Más allá de los ladrillos
El medio inalámbrico juega un papel clave en el desarrollo y la tecnología de edificios conectados. Hacer un edificio inteligente comienza por enlazar sistemas centrales tales como
- Luces
- Medidores de energía
- Bombas de agua
- Calefacción
- Alarmas contra incendios
- Plantas de refrigeración con sensores
- Sistemas de control.
En una etapa más avanzada hasta los ascensores y sistemas de acceso pueden ser parte del sistema.
En este ambiente es más apropiado instalar una red Wi-Fi centralizada usando puntos de acceso de nivel empresarial que no se instalan en cada unidad. Desplegar los puntos de acceso en corredores es conveniente y algunas veces inevitable desde el punto de vista cableado. Consecuentemente es mejor colocar puntos de acceso en algunas unidades en un patrón escalonado horizontal y verticalmente.
Los requisitos de red de edificios conectados para abordar el cubrimiento, capacidad y control de costo necesitan lo siguiente:
1. Red alámbrica
Las aplicaciones para edificios conectados corren transparentemente en la infraestructura Ethernet existente, aparte del tráfico de red adicional. Es importante evitar redes propietarias, tecnologías inalámbricas que no sean Wi-Fi y arquitecturas de sistema inusuales.
Los obstáculos potenciales pueden ser instalaciones y despliegues complejos, funcionalidad y soporte limitados, obsolescencia rápida y mayores gastos de capital y operativos.
Aprovechar la red actual es clave. La red definida por software también jugará un rol cada vez más importante en redes organizacionales.
2. Red inalámbrica
Los puntos de acceso estándar ya instalados para ofrecer servicios IP a los usuarios finales pueden manejar las operaciones de edificios conectados sin modificaciones.
Sin embargo es posible que se necesiten más puntos de acceso para asegurar el cubrimiento en todo el sitio.
Los puntos de acceso basados en Wave 2 tienen más capacidad así que el trabajo se limitará a analizar los flujos de tráfico en el tiempo y ajustar la configuración del sistema usando análisis.
3. Gestión y operaciones de red y TI
Implementar servicios de edificio inteligente presenta una oportunidad excelente para reconsiderar las soluciones de operaciones de red.
Esto no es porque los edificios conectados necesariamente representan un aumento masivo de la carga de trabajo para el personal de operaciones, sino porque siempre es una buena idea para revisar la red cuando se agregan aplicaciones nuevas de misión crítica.
Los sistemas de administración pueden incluir:
- Implementaciones basadas en la nube para mayor conveniencia y productividad;
- Control de acceso centralizado y uniforme;
- Estrategias basadas en políticas que minimizan los esfuerzos de configuración;
- APIs para extender servicios; personalización; monitoreo y refuerzo de políticas regulatorias.
Wi-Fi robusto y confiable es la base de la infraestructura para todas las tecnologías de conectividad actuando como el cimiento de la transformación digital.
A medida que la IoT avanza y trae consigo mayor implementación de tecnologías inteligentes, la interconexión entre personas, sitios y cosas sigue creciendo y se vuelve común.