América Latina tiene una nueva instancia de coordinación para las telcos: la ALT.
La nueva Alianza Latinoamericana de Telecomunicaciones realizará su primera reunión en el mes de junio.
Nadie duda de que los reflectores de quienes miran hacia la transformación digital actual están puestos sobre la Inteligencia Artificial.
No obstante, esta visión pasa por alto que, sin buena conectividad, las actuales plataformas de IA generativa (GenIA) son inoperables.
De allí que la necesidad creciente de más y mejor conectividad, con menor consumo de energía, es un clamor de las sociedad global.
Para encara los presiones y desafíos derivadas de esta circunstancia ha surgido una nueva instancia regional: la Alianza Latinoamericana de Telecomunicaciones, ALT.
El objetivo de la ALT es la integración de asociaciones y colectivos de la región que agrupan en sus países tanto a operadores locales como a organizaciones regionales independientes.
Por ello, entre los miembros fundadores de la Alianza Latinoamericana de Telecomunicaciones encontramos a:
- La Cámara de Cooperativas de Telecomunicaciones (CATEL, Argentina)
- La Cooperativa de Provisión y Comercialización De Servicios Comunitarios De Radiodifusión (COLSECOR, Argentina)
- Ambas en alianza con la Asociación de Telecomunicaciones Independientes de México (ATIM)
“El acuerdo de colaboración tiene la finalidad de compartir experiencias asi como juntar esfuerzos para incidir lógica, razonadamente y con datos en los programas, regulaciones y políticas públicas de la región”, explicó el nuevo director ejecutivo de la ALT, Maestro José Otero.
Atender a los retos
En este punto hay que recordar que el hoy Director Ejecutivo de la Alianza Latinoamericana de Telecomunicaciones (ALT), José Otero, ha hecho carrera en el sector.
De hecho, el pasado 31 de marzo el especialista concluyó una gestión de 11 años al frente de la vicepresidencia de 5G Americas para América Latina y el Caribe.
Con el propósito de capitalizar la experiencia de este ejecutivo, la nueva institucicon aspira compartir experiencias.
¿Para qué? Para juntar esfuerzos para incidir lógica, razonadamente y con datos en los programas tanto internacionales como nacionales.
Ello influyendo en la legislación y políticas públicas para lograr:
Conectividad e Inclusión
- Transitar del concepto de cobertura universal al de conectividad significativa.
- La Inclusión de operadores locales, la cual incluye la aproximacion en la construcción de políticas públicas tales como el despliegue de telecomunicaciones de cobertura social. También la delimitación de esta oferta por localidad.
- La promoción de la facilitación del acceso al espectro radioeléctrico a operadores locales, mediante políticas de uso local temporal y mecanismos de remuneración justa.
- Minimizar la necesidad del Estado de proveer, directamente, servicios de telecomunicaciones. Ello gracias a la inclusión de los operadores locales.
- La promoción de beneficios fiscales y subsidios para incentivar a operadores locales a invertir en infraestructura activa y pasiva. Igualmente, generar servicios de tecnología de última generación y su expansión en comunidades marginadas o de bajos ingresos.
- Promover la competencia equitativa entre diversas tecnologías y modelos de negocio en programas gubernamentales, garantizando el acceso justo a infraestructura, contenidos, tecnologías y servicios mayoristas.
- Promover la comunicación de experiencias en las soluciones técnicas, operativas y mercantiles de los distintos operadores.
2.- Legislación y regulación clara, eficiente, estable y justa
- Establecer una normativa transparente y estable para la obtención de concesiones, permisos, asignaciones y prórrogas.
- Combate a la piratería.
- Crear reglas equitativas para el acceso a infraestructura pasiva, tanto estatal como privada. Esto elimina barreras y promueve la transparencia para la instalación de redes de Telecomunicaciones.