El presidente de Telefónica y de la GSMA, José María Álvarez-Pallete, realizó el discurso inaugural del Mobile World Congress (MWC), cuya edición de 2022 arrancó hoy en Barcelona.
Con un mensaje de optimismo sobre el futuro y una advertencia de “optimista preocupado” sobre el presente, el presidente de Telefónica y de la GSMA, José María Álvarez-Pallete, realizó el discurso inaugural del Mobile World Congress (MWC), destacando: “La tecnología nos ha dado el poder de cambiar las cosas, pero ahora debemos decidir si las cambiamos para bien o para mal”.
Álvarez-Pallete ha trazado un mundo con constantes encrucijadas: “Este y Oeste; desigualdad e igualdad de oportunidades; mentira y verdad”.
En este escenario, conviene tener muy claras las ideas, y ha hecho hincapié en que muchos viven un temor cotidiano y han perdido la fe en sí mismos y en el futuro, situación que ha explicado en “la pérdida de valores” y en que se han difuminado las fronteras entre el avance tecnológico y el progreso moral.
“Las convulsiones del siglo XX y los desconcertantes acontecimientos de los albores del siglo XXI, como lo que está ocurriendo ahora mismo en Ucrania, nos han recordado que la tecnología carece de valores”, ha señalado en este sentido. “La tecnología nos ha permitido cambiar cosas y hacer otras muchas nuevas, pero somos nosotros quienes debemos decidir qué y cómo hacerlo”, ha precisado.
En el transcurso de su intervención, ha defendido que el papel del sector de las telecomunicaciones en la era de la superconectividad será aún más decisivo. “Somos la puerta al futuro. Las telecomunicaciones hacemos posible cuanto está por venir. Nada sucederá sin nosotros en la era digital”, ha advertido.
También ha puesto sobre la mesa la conveniencia de que sean atendidas las necesidades de los operadores: “Respetamos a todos los actores de la nueva economía. Pero nosotros también merecemos respeto. Es imposible afrontar los nuevos tiempos con las viejas normas. Nuestro sector no pide privilegios, sino justicia”.
“El tráfico de datos crece hasta un 50% anual. El reto de la inversión es enorme y merece especial atención. La carga de la inversión necesaria para gestionar este creciente volumen de tráfico debe recaer de forma justa”, ha argumentado.
“Respetamos a todos los actores de la nueva economía. Pero nosotros también merecemos respeto. Es imposible afrontar los nuevos tiempos con las viejas normas. Nuestro sector no pide privilegios, sino justicia”.
Un mundo mejor
“El mundo digital ha de ser un mundo mejor”, ha continuado Álvarez-Pallete, quien ha destacado igualmente los elementos básicos para avanzar en la transformación de la manera en que nos vemos a nosotros mismos y a los demás: “Colaboración, cooperación, solidaridad, responsabilidad, sostenibilidad y dignidad”. Y ha enfatizado que el futuro pasa obligatoriamente por crear “un ecosistema de valores compartidos”, para que todos puedan disfrutar de un futuro justo.
“Para lograr una nueva era de superconectividad necesitamos un nuevo marco. Una nueva era de colaboración hipersectorial”, ha indicado. Por este motivo, ha propuesto la suma de esfuerzos y el trabajo conjunto como palancas con las que construir un mundo mejor, basado en un nuevo contrato social entre Ciencia, Empresa y Sociedad.
“Las mejoras siempre han llegado cuando hemos impulsado el progreso. Cuando hemos confiado en el futuro. Cuando nuestra sociedad ha sentido como propios los avances de la comunidad científica y del ecosistema empresarial. Esto es lo que permite industrializar el conocimiento y crear nuevos servicios. Cuando los Estados y las empresas han trabajado juntos. Siendo positivos. Soy optimista. Quizás, optimista preocupado, pero optimista”, ha confesado.
“Si lo hacemos bien, esta revolución digital traerá consigo el progreso social. Porque el mundo digital debe ser un mundo mejor, con las personas y los valores en el centro”.
El presidente de Telefónica y de la GSMA ha subrayado el papel fundamental del sector de las telecomunicaciones en la definición de la nueva era digital y el mundo de la superconectividad: “El mundo necesita un sector de las telecomunicaciones robusto y sostenible. Nada de cuanto está por venir sucederá sin nosotros. Nosotros somos los que tenemos la capacidad y la responsabilidad de construir las infraestructuras, las redes del futuro. Nosotros hacemos realidad el nuevo mundo digital. Nosotros aseguramos la conectividad. Hemos sido esenciales durante la pandemia porque siempre lo hemos sido y así continuaremos”.
Y ha añadido: “Podemos decirlo con orgullo: sin nosotros, la revolución tecnológica más profunda de la historia de la humanidad no se habría producido”.
Educación, competencias digitales y empleabilidad
Álvarez-Pallete ha perfilado las ventajas competitivas del sector de las telecomunicaciones, al que ha presentado con la credencial de ser el único capaz de cambiar la vida de las personas en todo el mundo. “Ningún otro sector ha contribuido tanto al avance de la economía y el progreso social como las telecomunicaciones. Sin nosotros todo sería peor y muchas personas quedarían atrás para siempre, de manera definitiva, atrapadas en la brecha de disrupción tecnológica”.
“La GSMA tiene la fuerza de liberar todo el potencial de la digitalización en favor de la industria y de guiar a la sociedad”.
También ha señalado que, precisamente, “la visión de la GSMA es liberar todo el poder de la conectividad para que las personas, la industria y la sociedad prosperen”. En este sentido, ha puesto de relieve que “la educación, las competencias digitales y la empleabilidad son herramientas clave para luchar contra la brecha de la desigualdad”.
La aportación del sector también resulta determinante para crear un mundo más sostenible y eficiente. “El cambio climático es el mayor reto al que se enfrenta la humanidad. Nuestra industria tiene mucho que aportar. En términos sencillos, no hay transición energética sin digitalización”, ha afirmado.
El protagonismo de la Web3 y el Metaverso
José María Álvarez-Pallete ha resaltado igualmente la celeridad con la que el mundo está asistiendo a estos cambios, acrecentada por las necesidades creadas por la pandemia. “Estamos viviendo una nueva era, la revolución tecnológica más profunda de la historia de la humanidad. Se espera que su impacto sea cuatro veces mayor que el de la Revolución Industrial. Todo está ocurriendo a una velocidad asombrosa. La pandemia ha sido como una máquina del tiempo que acelera aún más la digitalización y esto es irreversible”, ha asegurado.
Esta nueva era ya está mostrando su potencial, pero los mayores progresos están aún por venir. “Esto no ha hecho más que empezar. La conectividad de ultra banda ancha ya está aquí”, ha indicado, para luego ofrecer más detalles de ese futuro que ya emerge: “La capacidad de procesamiento y almacenamiento crece exponencialmente y se traslada a la nube. La realidad virtual, aumentada y mejorada está cambiando la forma en que experimentamos todo. El Internet de las Cosas y el Big Data están produciendo y manejando enormes cantidades de datos”. “Y aún hay más. Blockchain, Computación Cuántica, Ciberseguridad, Edge Computing y 5G Stand-Alone e Inteligencia Artificial. Un nuevo mundo inmersivo está casi aquí con la Web3 y el Metaverso. Ya están produciendo una disrupción súbita”, ha añadido.
“Es el momento de poner a las personas y los valores en el centro”.
Durante su intervención, Álvarez-Pallete también ha argumentado que esta nueva era que se está desencadenando debe tener muy presente su dimensión humana y social. “Los seres humanos nunca deben ser categorizados por su acceso a la digitalización. No debe haber distinción entre los que tienen acceso al nuevo mundo digital y los que no lo tienen”.
Para el presidente de Telefónica, el nuevo mundo tecnológico y superconectado proporciona una magnífica oportunidad para el progreso del conjunto de la sociedad. “Si lo hacemos bien, esta revolución digital traerá consigo el progreso social. Porque el mundo digital debe ser un mundo mejor. Es nuestra responsabilidad colectiva difundir los beneficios de la digitalización y asegurarnos de no dejar a nadie atrás”, ha subrayado.
Una nueva era que tenga siempre a las personas como protagonistas: “Es el momento de poner a las personas y los valores en el centro. En un momento en que la tecnología está más presente que nunca en nuestras vidas, no podemos olvidar que son las personas las que dan sentido a la tecnología y no al revés”.
El presidente de Telefónica y de la GSMA ha hecho un llamamiento final a la colaboración y ha instado al sector privado y al público a estrechar lazos y unificar miradas para que “entre todos seamos capaces de no levantar más muros, sino de abrir puertas”. “Juntos, nuestra fuerza y nuestra ambición son más grandes. Juntos alcanzaremos los mayores retos”, ha concluido.