Son muchos los usuarios que, por desgracia, han sufrido este problema. Windows XP es cada vez más lento y funciona realmente mal, hasta el punto de que el equipo puede llegar a tardar nada menos que una hora en arrancar.
¿Por qué ocurre esto? Dando una explicación lo más sencilla posible diremos que la culpa la tiene el proceso integrado svchost, cuyo uso de la CPU se eleva al 100%, aunque el causante directo es Windows Update. Os lo explicamos con detalle.
Cada vez que se actualiza Windows XP mediante Windows Update el sistema comprueba cierta información lógica, algo necesario antes de proceder a la sustitución de los parches anteriores.
Dicha información se almacena en los servidores de Microsoft, donde existe un histórico de parches con información realmente extensa. Con esto en mente seguro que más de uno ya imagina por donde van los tiros.
Windows Update utiliza un algoritmo de escalado secuencial al consultar el histórico de parches, lo que supone que cada nuevo parche doble el tiempo necesario para procesar la lista que conforma el citado histórico de actualizaciones.
Dada la antigüedad de Windows XP y la larga lista de parches que acumula podemos imaginar el grado de saturación que llega a alcanzar el veterano sistema operativo de Microsoft. El gigante de Redmond está al corriente del problema y de hecho creía haberlo solucionado el pasado noviembre, pero por desgracia no fue así.
Ahora la compañía ha comentado que el parche de diciembre debería poner punto y final al mismo, algo que sin duda agradecerían muchos usuarios, sobre todo si tenemos en cuenta que el soporte de Windows XP tiene los días contados.
Francisco Carrasco, CIO America Latina