Casi tan viejos como los primeros virus, los ataques DDoS son una amenaza temible para las Pymes.
Por fortuna, la Inteligencia Artificial está resultando una aliada útil para mantener la continuidad web de las empresas.
Sin duda, el ransomware es el enemigo público número uno de las empresas. Pero, ni fue el primero no es el único.
El phishing y los ataques de DDoS son mucho más antiguos y siguen siendo grandes amenazas.
En el caso de las pequeñas y medianas empresas, la capacidad de los ataques de Denegación de Servicio Distribuido (DDoS, por sus siglas en inglés) de interrumpir sus operaciones digitales sin una rápida solución de continuidad deja claro por qué siguen siendo un terror para los CISOs.
Esa es una mala noticia. Pero hay una peor: la sofisticación y el volumen de los ataques DDoS han aumentado exponencialmente.
Esto está impulsando la búsqueda de soluciones tecnológicas robustas.
Pero, ¿por qué una forma tan antigua de ataque sigue siendo tan devastador?
En principio hay que recordar que estos ataques, que sobrecargan los servidores y redes con tráfico masivo.
Por lo general, tienen el objetivo de interrumpir el acceso a servicios y aplicaciones, causando pérdidas económicas y dañando la reputación de las empresas.
Más de una forma de fastidiar a su organización
Se cree que los ataques de DDoS son simples. No es así.
Además, han evolucionado a lo largo del tiempo. En los últimos años, la sofisticación y frecuencia de los ataques DDoS han aumentado drásticamente.
Los mismos han estado impulsados por la disponibilidad de herramientas de ataque más avanzadas y la creciente dependencia de las empresas en la infraestructura digital.
“Existen varios tipos de ataques DDoS, los ataques de volumen consisten en sobrecargar la red de la víctima con lo que, en un principio, parece ser tráfico legítimo hasta desbordar el sitio con tráfico errante”, explicó el Vicepresidente de Noventiq Latinoamérica, Pablo Gagliardo.
Según señaló el ejecutivo, todo esto da lugar a una funcionalidad deficiente o desconexión por completo del sitio web de la red de la víctima con una gran cantidad de tráfico.
Este tipo de ataques resultan los más conocidos y casi no se piensa en otra cosa cuando hablamos de ataques de DDoS.
Sin embrago, hay otros. De este tipo son, también, los ataques de protocolo, los cuales explotan debilidades en las capas de protocolo de red.
Y, por último, encontramos los ataques de capa de aplicación, los cuales se dirigen a aspectos específicos de una aplicación o servicio, como el protocolo HTTP o el código SQL.
En este contexto, la inteligencia artificial emerge como una poderosa aliada en la lucha contra los ciberataques DDoS proporcionando:
Entre las formas más comunes en que la Inteligencia Artificial (IA) combate los ataques DDoS se encuentran las siguientes:
La detección temprana
Esta implica el uso de algoritmos de machine learning para identificar patrones de tráfico inusuales que podrían indicar un ataque DDoS inminente.
La mitigación automatizada
Una de las mejores noticias posibles pues esto permite que los sistemas respondan instantáneamente a estas amenazas.
De esta manera, bloquean IPs sospechosas, limitando la tasa de solicitudes o redirigiendo el tráfico malicioso, antes de que pueda causar daño significativo.
La adaptación dinámica
Capacidad asociada a la anterior. Se refiere a la habilidsd de la IA para ajustar, continuamente, sus modelos y estrategias.
Ello en función de las nuevas tácticas empleadas por los atacantes, asegurando una defensa más robusta y flexible.