Aunque la paridad de género en tecnología todavía es un deseo las mujeres en los centros de datos ya no son una rareza.
Por el contrario, cada vez son más las historias de éxito de este cambio de paradigma.
Semana Mayor o no, el mes de la Mujer no ha terminado y su lucha por lograr la equidad no se detiene.
El objetivo aún es alejado según revelan todas las investigaciones. Tal vez, la paridad de género en algunas áreas no se logre nunca.
Pero lo que es fundamental es lograr que las oportunidades (no la distribución de cargos) sea paritaria.
De acuerdo con la Encuesta de Gestión y Operaciones, realizada por el Uptime Institute, históricamente, los equipos de diseño y operaciones de centros de datos han empleado a pocas mujeres.
Y lo han hecho en forma nitable:
- Más de tres cuartas partes de los operadores informan que emplean alrededor del 10% de mujeres o menos
- Y una quinta parte todavía no emplea a una mujer en sus equipos de diseño y operaciones
Repetimos: uno de cada cinco ooeradores, es decir, el 20% de los encuestados no ha contratado a una mujer en estos equipos. Nunca.
Así que, si usted alguna vez pensó que se estaba exagerando con el tema de la necesidad de impulsar la inclusión en algunos sectores, piense otra vez.
Las cifras son contundentes.
Avances ganados a pulso
La buena noticia es que, aunque 20% es mucho para ser un error muestra o ser tildado como una minoría poco significativa, es indiscutible que es una minoría.
Todavía hay mucho que avanzar pero ya este tipo de empresas es cada vez más rara.
Veamos algunas historias de éxito que nos señala como, un día a la vez, las mujeres en los centros de datos se ha transformado en una tendencia y no en una rareza.
Sosa y el desafío desde una máquina dobladora
Hace 17 años, Macaria Sosa llego a la planta de Vertiv en Reynosa. Venía de Veracruz y anhelaba más y mejores oportunidades laborales para brindarle una mejor vida a su hija que, hoy por hoy, es estudiante de Enfermería.
Sosa ha logrado ser la única mujer en la planta que maneja una máquina grande: una dobladora de metal llamada Cincinnati.
En su trabajo, Sosa toma las grandes estructuras de metal ya cortadas y hace pequeños dobleces, con ayuda de los programas estandarizados de la máquina.
Ella hace los cambios en las piezas según las necesidades del producto final, una labor manual donde la habilidad técnica, el cuidado y la precisión son esenciales.
“Al inicio fue un poquito diferente para mí porque era la única mujer en el área. Pero me adapté y me gané el respeto de mis compañeros. Siempre he dicho que querer es poder y aunque es un trabajo pesado, aprendí a hacerlo. Ahora se me pasa el tiempo muy rápido en el trabajo”, explicó la operadora de la maquina Cincinatti de Vertiv en Reynosa, Macaria Sosa.
Lemus y el ¡Lo logré!
Priscila Lemus quería estudiar periodismo, pero al convertirse en madre muy joven decidió estudiar ingeniería industrial, aprovechando el desarrollo de ka zona fronteriza donde reside.
Tenía dos trabajos simultáneos para cumplir con los deberes de sus pequeños y carrera. Con el apoyo de su familia, terminó sus estudios en ingeniería industrial.
Hoy trabaja en la planta de Tijuana y se siente muy satisfecha de su decisión de aventurarse en un mundo que no conocía. Ha formado parte de Vertiv por 11 años, donde es una pieza clave del departamento de ingeniería mecánica.
“Cuando terminé mi carrera y me llamaron ingeniera, me di cuenta de que era real. Un día diseñé la estructura base del centro de datos y en ese momento pensé: ‘¡Lo logré! Aquí es donde pertenezco’. Los centros de datos son algo que me apasiona, y saber que esa base va a cimentar algo importante para un hospital o una escuela me hace sentir parte de algo significativo. Eso me llena de motivación”, afirmó la Ingeniera industria de Tijuana, Priscila Lemus.
Guerrero y el diseño de piezas para plantas de enfriamiento
Marcela Guerrero, ingeniera industrial en la planta de Monterrey, se sumerge diariamente en el diseño de piezas de:
- Láminas de metal
- Tuberías
- Tornillos
También en la supervisión de ensambles y modelos de documentación de equipos de gerenciamiento térmico con el objetivo de asegurarse de que los productos sean altamente eficientes y de la mayor calidad.
En sus más de dos décadas de carrera profesional, se ha enfrentado a momentos de discriminación de género, como comentarios desalentadores y obstáculos en el trabajo.
Actualmente, con casi tres años en Vertiv y ahora parte del departamento de Ingeniería Mecánica, sirve de tutora a los jóvenes ingenieros.
“Debemos sentirnos orgullosas por lo que hacemos, por el camino que hemos recorrido o que planeamos recorrer. Debemos hacer valer nuestra voz, ser valientes, confiar en nuestras habilidades y no tener miedo a lo desconocido, porque el crecimiento profesional surge de lo nuevo, de todo aquello que no conocemos”, aseguró lala Ingeniera mecánica de Vertiv en Monterrey, Marcela Guerrero.