El brote de coronavirus supone una amenaza global sin precedentes que, según Credit Suisse, conllevará cambios a largo plazo en nuestra forma de pensar, trabajar y vivir, y con implicaciones para los inversionistas.
Con este telón de fondo, Credit Suisse acaba de publicar la actualización anual de las Supertendencias, su marco de referencia para las inversiones temáticas en acciones de alta convicción y a largo plazo. Si bien la pandemia del COVID-19 ha provocado un profundo vuelco en la economÃa global, esta última actualización ha vuelto a confirmar los aspectos centrales de las cinco tendencias de inversión originales. Además, se ha añadido una sexta tendencia para enfocar el tema del cambio climático.
Las Supertendencias de Credit Suisse, presentadas por primera vez hace tres años, se centran en las tendencias sociales plurianuales de las que se consideran brindarán oportunidades de negocio de rápido crecimiento. Cada una de éstas identifica oportunidades de las que se espera se genere un rendimiento superior como resultado de esos cambios. Sin embargo, los temas clave: sociales, polÃticos, económicos y ambientales varÃan continuamente, razón por la cual el informe actualizado de las Supertendencias también aborda los cambios provocados por la pandemia de COVID-19.
“Nuestra forma de vida habitual se ha detenido a causa de la pandemia de coronavirus. Esta crisis está desafiando los sistemas y las estructuras existentes y sembrando las semillas de nuevos cambios que se avecinan a medida que vamos descubriendo las limitaciones en nuestra forma de aprender, trabajar y vivir. Nuestras Supertendencias evolucionan al compás del mundo cambiante que nos rodea, y creemos que siguen siendo temas de inversión convincentes en el presente y futuro”, explica Michael Strobaek, Global CIO de Credit Suisse.
Las tendencias actualizadas de inversión a largo plazo, introducidas por primera vez en 2017, son las siguientes:
Cambio climático – Descarbonizar la economÃa
Se basa en las razones para invertir en empresas que contribuyen de forma más eficaz a la transición hacia una economÃa global menos intensiva en carbono. El reciente paro económico causado por la pandemia de COVID-19 ha reducido de manera considerable, en varias regiones, las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) antropogénicas, lo que es una clara señal de lo que podrÃa lograrse en el futuro, creando una economÃa global libre de carbono y más sostenible. Los sectores clave en los que se centra esta tendencia de inversión son: la producción de electricidad sin carbono, el transporte, los actores pioneros del cambio en la industria del gas y el petróleo; la agricultura y la producción de alimentos.
Sociedades preocupadas – Capitalismo integrador
Refleja el hecho de que el descontento popular está relacionado más bien con los temas nacionales, en particular con las desigualdades, que con la percepción de amenazas externas y la tendencia al proteccionismo. El enojo ha dado paso a la preocupación. Credit Suisse, con la ayuda de un nuevo Ãndice, realiza un seguimiento de si las preocupaciones están aumentando o disminuyendo. La COVID-19 ha demostrado que las verdaderas amenazas emergentes son de carácter global y que requieren una cooperación multilateral, asà como una protección individual.
EconomÃa plateada – Invertir en el cambio demográfico
El envejecimiento de la población probablemente continuará impulsando por muchos años las oportunidades de negocio y el rendimiento de las inversiones. En los mercados emergentes (ME), en especial, el envejecimiento se producirá una velocidad jamás experimentada en la mayorÃa de esos paÃses.
Infraestructuras – Cerrando la brecha
El gasto en infraestructuras está a punto de entrar en una fase de expansión. Hay brechas, están en todas partes, puesto que las viejas economÃas tienen que afrontar tanto las necesidades existentes como las nuevas y, además, teniendo en cuenta la tendencia hacia una mayor sostenibilidad. Al mismo tiempo, las nuevas economÃas continúan urbanizándose a pasos acelerados. La expectativa de unas tasas de interés más bajas y, a veces, incluso negativas, durante un perÃodo prolongado deberÃa brindar un estÃmulo adecuado para las inversiones. Dado que las preocupaciones por el cambio climático han despertado una gran atención pública, el potente efecto catalizador normativo y polÃtico deberÃa añadir una dinámica adicional a este tema.
La tecnologÃa al servicio del hombre
Las continuas innovaciones y los desafÃos surgidos con la crisis del coronavirus siguen convirtiendo a la tecnologÃa en un sector atractivo para los inversionistas. Los factores que impulsan este tema de inversión, tanto del lado de la demanda como del progreso tecnológico, siguen siendo poderosos y deberÃan beneficiar en los próximos años a las empresas incluidas en estas áreas de enfoque.
La sostenibilidad continúa siendo un tema clave de los valores millennial
Incluido el consumo responsable, y con un enfoque ambiental, social y de gobierno corporativo (ESG) a toda la selección de acciones de inversión. La salud, que es otra prioridad en la agenda de los millennials, genera una creciente demanda de alimentos sanos y sostenibles: la dieta planetaria. En consecuencia, junto con la transición a una economÃa circular, hemos incorporado los alimentos sostenibles en este tema de inversión.