Las aplicaciones modernas seguirán siendo dinámicas y distribuidas, por lo que la superficie de ataque seguirá expandiéndose. Para proteger su empresa necesita una infraestructura donde la seguridad sea un componente integrado y no un añadido «a posteriori».
VMware reduce la superficie de ataque de las aplicaciones gracias a una seguridad intrínseca y uniforme en el centro de datos, la cloud y el perímetro. VMware NSX permite la microsegmentación en la red para evitar la propagación lateral de las amenazas.
VMware AppDefense impone el estado y el comportamiento esperados de las aplicaciones en los puntos de acceso de los centros de datos, mientras que VMware vSphere y VMware vSAN ofrecen cifrado para los datos en reposo.
VMware e Intel transforman la seguridad proporcionando medidas integrales de seguridad basadas en software y hardware en la infraestructura de aplicaciones y los terminales. Estas medidas maximizan la visibilidad, el contexto y el control para proteger las interacciones entre los usuarios, las aplicaciones y los datos.