La demanda de cada vez más ancho de banda para ejecutar Inteligencia Artificial (IA) fue evaluado por el más reciente estudio de Ciena.
La investigación determinó el rol de los centros de datos frente a la actual y futura demanda. También la necesidad de incorporar IA para hacer la infraestructura más sustentable.
Las distintas posibilidades de la Inteligencia Artificial (IA) están transformando muchas de las actividades que realizamos cada día.
En general, se estima que pueden mejorar la eficiencia y productividad, tanto de muchos verticales de empresas como áreas.
La atención al cliente, la creación de contenidos, así como el procesamiento de grandes volúmenes de datos para análisis y toma de decisiones son algunas de las áreas que se benefician de estas tecnologías.
Pero, para disfrutar de sus beneficios, empresas y sociedades deben fortalecer tanto su infraestructura de procesamiento de datos como eléctrica y de conectividad.
Es por ello que podemos hablar de una revolución, pues impacta a suficientes sectores como para generar transformaciones tan profundas como de largo plazo.
“Históricamente, el tráfico de red ha crecido a un ritmo del 20% al 30% anual. Se prevé que la IA acelere drásticamente este crecimiento”, destacó el Chief Technology Officer Internacional de Ciena, Jürgen Hatheier.
Para el CTO, todo ello ha ocasiona que los operadores estén replanteando sus arquitecturas y planificando cómo satisfacer esta demanda de forma sustentable.