En el mes de mayo se celebra el Día de la Madre España y varios países de América Latina. Buen momento para retomar la igualdad laboral.
Por Nadia González, vicepresidenta de Thales para América Latina y country director de Thales en México
Asi cómo el Dia Internacional de la Mujer, el Día de las Madres se presta para reflexiones. Son fechas muy relevantes para Thales, cuya fuerza laboral tiene una importante representación de la población femenina que, no solo se limita a puestos básicos sino, también, al nivel directivo.
Ello ocurre en una dinámica laboral donde el liderazgo no está supeditado a una condición social, de creencias, preferencias o género.
Es más que evidente que México necesita empresas más competitivas y productivas, y tal como lo menciona un estudio del IMCO, publicado en enero de 2021:
“Una forma de lograrlo es a través de estrategias de inclusión que incorporen a más mujeres en el sector privado, en especial en puestos de alto nivel”.
Sin embargo, aunque cada vez hay más empresas que implementan políticas de inclusión, persiste una baja representación de trabajadoras en el sector, lo cual se hace más evidente en puestos de alto nivel, como los consejos de administración y los cargos directivos.
¿El género importa para un puesto de liderazgo?
Si lo que se quiere es acabar con el espejismo de un mundo cuya balanza parece seguir inclinándose hacia un determinado sector, es importante tener presente que el “liderazgo” es una palabra sin género, por lo mismo no creo que haya una visión particular de liderazgo.
Por ello, la mejor manera de cerrar la brecha, sobre todo en una industria en la que predomina el hombre, es no acreditando que haya una visión femenina del liderazgo, lo que permite no ponerse límites.
Además, debemos evitar el síndrome del impostor.
El tema de la industria donde “predomina” el hombre, puede crear barreras, porque siempre hay una cierta cooptación, pero eso puede ser solo una proyección y no una realidad.
Desde mi experiencia trabajando en diferentes proyectos, puedo asegurar que cada gerente es una particularidad, y esto no forzosamente está relacionado con su género.
Por ello puedo asegurar que, para triunfar, la prioridad es conocerse, enfocarse en sus colaboradores y sus clientes.
En realidad, nunca le di mucha importancia al género como referencia de medición al talento en ciertos desempeños.
Seguramente eso habrá ayudado a crear una base de competencias esperadas sin diferenciación.
El reto principal está en las mujeres que en varias ocasiones definen sus limitaciones, lo que les da cuerda a los hombres para mantener cierta supuesta superioridad.
Al hablar del papel de las mujeres en las TI, cada una hemos hecho aportaciones en todas las áreas desde el desarrollo hasta la creación, pasando por implementación y gerenciamiento de proyectos y equipos.
No hay un sector en particular tampoco:
- Telecom
- Fintechs
- Salud
- Y cyber, entre otros
Y México ¿en dónde se encuentra en materia de igualdad laboral?
Desde mi punto de vista, México vive una situación interesante y aún con mucho por hacer.
Muchas mujeres mexicanas tienen altos cargos empresariales o políticos. Por esa parte, creo que está a la vanguardia de muchos países.
Hoy en día, muchos profesionales tienen la oportunidad de trabajar fuera unos años y tienen la oportunidad de percatarse del profesionalismo que poseen y consiguen liberarse de ciertos modelos.
Por supuesto, el equilibrio vida personal-profesional es absolutamente clave: una vida profesional exitosa es esa en la cual se puede avanzar sin perderse.
Siempre tratando de manejar prioridades personales (familia, deporte, aprendizaje, lectura) y profesionales (viajes, reuniones, emergencias) para no perder el enfoque de lo que es importante y lo que es secundario.
Si me dijeran ¿qué consejo podría darles a las nuevas generaciones de hombres y mujeres? el consejo sería el mismo para ambas partes: dedicarse, ser centrado, proteger su espacio personal.
Los que sean madre o padre, que no olviden de proponer marcos modernos e inclusivos a su descendencia.