En la nueva normalidad del trabajo es primordial entender varios temas, la mayorÃa asociados a las personas más que a la tecnologÃa propiamente tal.
Por: Maryerlin Flores, gerente de Administración y Finanzas de ITQ Latam.
Cada persona es un mundo en sÃ, por lo que no es posible encasillar en un concepto o una idea general a todos por igual. Si bien hay patrones que todos hemos vivido, donde nos regimos por horarios y rutinas diarias de trabajo, eso en muchos casos se perdió estos últimos meses d enueva normalidad.
El home office dejó ver a los madrugadores, que comenzaban a enviar mails muy temprano en la mañana; y a los nocturnos, quienes a las 2 de la mañana estaban en su mejor momento productivo. Sin duda, para ellos el modelo de teletrabajo les acomoda bastante.
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Asimismo, están los que no quieren trabajar más de su casa, pues añoran la oficina; y los que no quieren salir de su casa por miedo a contagiarse y prefieren seguir en la modalidad de teletrabajo, porque allà se sienten resguardados y protegiendo a su familia. Este último es un factor que, ciertamente, se debe tomar muy en cuenta.
Además, está el tema logÃstico. Los niños no están en los colegios y tampoco está el acceso a las guarderÃas, por lo que hay un porcentaje que no cuenta con los medios para regresar a un nivel presencial. Por otro lado, están los que sà pueden ir a la oficina y requieren de un nivel más presencial para cumplir sus funciones, por lo que les acomoda un sistema semi presencial.
Con todo, lo cierto es que las empresas deben tener algunas consideraciones que priorizar para volver al trabajo presencial y también para seguir con el home office en la nueva normalidad. En cuanto a lo primero, lo principal es cumplir con las medidas de seguridad; y revisar quiénes son grupo de riesgo o quiénes viven con personas de riesgo. Ellos son los que no debieran volver al trabajo presencial o retrasar lo más posible su regreso. Otro punto a evaluar es que los niveles de stress en algunos casos, debido al encierro, han sido bastante altos y en algunos casos es beneficioso volver al trabajo presencial. Por lo que las empresas deberÃan realizar un levantamiento de necesidades y aspectos a considerar para un regreso programado.
En cuanto a lo segundo, se requiere un acceso a una conectividad segura y sin intermitencias; también se debe avanzar en la concientización sobre ciberseguridad,  tanto por los accesos a sistemas propios de cada empresa desde el exterior, como de la seguridad que se disponga a nivel de hardware y software, donde  la principal componente es la persona.
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Una planificación exitosa de retorno laboral debiera tener en cuenta en primer lugar el cumplimiento de la normativa vigente. Las medidas tomadas por el gobierno van cambiando según se va avanzando en esta pandemia, por lo que se debe estar siempre atentos a los cambios y nuevas medidas que se van implementando. Asimismo, contemplar programas de ciberseguridad, salud mental, personas de alto riesgo y acondicionamiento de oficinas.
En definitiva, las empresas han roto el miedo a la baja producción, al permitir el trabajo remoto, por lo que una modalidad de cumplimiento de objetivos es lo que finalmente debe primar. AsÃ, el modelo hÃbrido es el que al parecer será el que tome la delantera y las empresas deberán una vez más adaptarse para no perder productividad y tampoco provocar stress innecesario en las personas.