El mercado de las telecomunicaciones en América Latina es difícil y muy competitivo, y el de los celulares lo es todavía más. Razones sobran para calificarlo de esta manera y entre las más importantes podemos decir que las diferencias económicas, de volumen poblacional; unidas a factores políticos y sociales enardecen las ventas. Países que geográficamente son vecinos, pueden tener economías totalmente dispares, y esto puede ser un enorme dolor de cabeza para las empresas que se ubican en este sector.
CIO América Latina | Por: Mario Augusto Beroes Ríos
El sector de las telecomunicaciones en Colombia no escapa a esta realidad. El término “competencia” puede ser cambiado por uno más radical: Pelea. Y es que esto es lo que actualmente sucede en la nación sudamericana. Una vieja pelea, que ahora tiene un nuevo episodio. Los cargos asimétricos vuelven a ser el motivo. Las acusaciones van de lado a lado; de empresa a empresa, y los tenores de las mismas hace tiempo que dejaron de ser caballerescos.
Tigo y Movistar aseguran que Claro no cumple las regulaciones vigentes. Claro,por supuesto, desmiente las acusaciones y señala a sus competidores de mentir.
¿Qué son cargos asimétricos?
Según una nota publicada en la revista Semana (http://www.cioal.com/wp-admin/post-new.php), los cargos asimétricos resultan ser, en términos sencillos, el monto por minuto que pagan los operadores entre sí cada vez que un usuario hace una llamada de un operador a otro. Cada mes, Claro, Movistar y Tigo, que poseen su infraestructura, se envían cuantas de cobro para saldar estos costos.
La historia tuvo un episodio decisivo el 31 de diciembre del 2014, cuando la Comisión de Regulación de Comunicaciones (CRC) decidió prorrogar la medida mediante la resolución 4.660, con el objetivo de contener a Claro, el actual operador dominante que tiene más del 40% del mercado de usuarios de telefonía móvil colombiano.
La regulación, originada en 2012, tiene dos objetivos: mejorar la competencia entre los operadores y mejorar las tarifas que pagan más 30 millones de usuarios que hay en el país. Por supuesto, la decisión de la CRC estuvo precedida de una fuerte confrontación legal entre los tres operadores.
Trompadas empresariales
El 2015 arrancó con una nueva controversia legal y administrativa. Por un lado, Tigo y Movistar aseguran que Claro decidió no pagar los cargos del mes de enero, mientras que desde Claro aseguran que sí hubo desembolso.
Tigo envió una correspondencia al ministro de Tecnologías de la Información y la Comunicaciones (MinTic), Diego Molano, en la que aseguran que “Claro rechazó y devolvió la cuenta de cobro y factura remitida por Colombia Móvil (Tigo) correspondiente a la conciliación de los cargos de acceso del tráfico móvil del mes de enero de 2015”.
De acuerdo con una comunicación oficial de Claro (antes Comcel), “se procedió a pagar y a cobrar a los operadores móviles los valores que no están en disputa. Comcel ha pagado a Telefónica los cargos de acceso correspondientes a las conciliaciones de enero de 2015, por un valor de 795.609.937 millones de pesos y a Tigo un valor de 1.409.558.621 de pesos”.
La confrontación llegó a la Superintendencia de Industria y Comercio (SIC), por cuenta de una demanda interpuesta por Tigo y Movistar. La primera medida que tomó la SIC fue consultarle a la CRC “¿cuál es el valor que Claro le puede cobrar desde el primero de enero de 2015 al operador Tigo para el acceso uso e interconexión de redes para la terminación de llamadas?”.
Sin embargo, Claro le ha solicitado en cinco oportunidades a la CRC mayores claridades sobre los cobros que se deben hacer entre los operadores. Queda de parte del organismo regulador de Colombia, dirimir está disputa de miles de millones de pesos.
El MinTic, que ha promovido las medidas para mejorar la competencia entre los operadores no se ha pronunciado. Han dicho, a través de voceros, que no harán pronunciamientos públicos, mientras que la CRC tome las decisiones del caso.
¿Y entonces?
Claro insiste en que los cargos asimétricos no tienen fundamento legal y se ampara en un documento de la OCDE que, según ellos, indica que estos cobros “benefician a los operadores y no a los usuarios”.
Por su parte, Tigo y Movistar también arguyen una comunicación de la OCDE para argumentar su caso. Aseguran que el organismo le recomendó al Gobierno combatir la concentración de mercado, y la mejor medida para hacerlo es promover los cargos asimétricos para beneficiar y promover la competencia.
Usuarios beneficiados. ¿Si o no?
En esta pelea empresarial la pregunta más evidente es lo que pueda pasar con los usuarios de los servicios De acuerdo con voceros de Tigo y Movistar estos cobros impactan positivamente las facturas de los usuarios.
La pelea continúa y será cada vez más dura. Todos saben que la directiva de Claro apuesta a la confrontación y a la competencia “sin ambagues”, y así lo ha demostrado en otros mercados del área. Los rounds de esta confrontación tendrán relación con lo jurídico y técnico. Como decía un locutor deportivo venezolano, “No se vaya que esto se pone bueno”.