Un fabricante minorista quiso sustituir una gruesa carpeta de cuatro pulgadas y tres anillos llevada por los representantes de ventas de campo con una aplicación para el iPhone, recuerda Quinton Alsbury, co-fundador de MeLLmo, fabricante de la aplicación móvil de negocios Roambi. Sin embargo, el fabricante cayó en una trampa común: la creación de una aplicación monstruosa que es prácticamente imposible de navegar por los usuarios de la pantalla táctil de 3,5 pulgadas del iPhone.
Este es solo uno de los muchos escollos que enfrentan los CIO que desean traer herramientas de campo y de análisis del negocio a su iPhone. Una aplicación de iPhone que ofrece al usuario una experiencia terrible puede significar un problema para el CIO. “El umbral de adopción de los usuarios es muy, muy delgado”, señala Alsbury. “Si hay que esperar mucho tiempo para que algo suceda, simplemente va a poner el teléfono en su bolsillo”.
Las aplicaciones de negocios en el iPhone ofrecen un marcado contraste en estilos, enfrentando el amor de un aficionado a la tecnología por las características y funciones, en contra de las expectativas de un usuario de negocios por la simplicidad y la velocidad. Aquí hay algunas cosas que debe y que no debe hacer para ayudar a que los CIO naveguen en estas aguas difíciles.
1. No repita la laptop: Demasiados CIO tratan de replicar en el iPhone los datos y características que ofrece una computadora portátil. Este es un camino seguro al fracaso. Basta con mirar a la experiencia de usuario altamente criticada de la aplicación Citrix Receiver, que básicamente trata de ofrecer un escritorio virtual en el iPhone. Los constantes “pellizcos” y ampliaciones de texto en la pantalla del teléfono, y la introducción de datos mediante un pequeño teclado virtual sin un mouse, apaga incluso al amante más ardiente de los gadgets.
2. Acepte la movilidad: El problema con la replicación es que asume que los usuarios utilizarán el iPhone de una manera similar a la computadora portátil. Sin embargo, los casos de uso son muy diferentes.
3. Considere los siguientes tres escenarios: Un vendedor podría estar en su escritorio con un tablero de inteligencia de negocios (BI) abierto en su computadora, viendo el cambio de datos en tiempo real durante todo el día. En camino a donde un cliente, podría hacer una parada en un café, encender su computadora portátil, abrir una hoja de cálculo grande y analizar los datos. Mientras que en el ascensor subiendo a ver a su cliente, podría sacar su iPhone para encontrar una rápida respuesta a algo.
Para los CIO, esto significa tratar de predecir dónde es que los usuarios móviles pueden utilizar la aplicación y qué tipo de respuestas van a estar buscando. Puede que no haya mucho tiempo para que el usuario navegue y profundice en los datos. Puede que no haya conexión a Internet. De cualquier manera, la aplicación debe ofrecer respuestas a la velocidad del rayo.
“Usted no desea que los usuarios se queden mirando a la pantalla con un ícono girando en ella”, mientras esperan que los datos se descarguen, señala Alsbury, y agrega: “Es posible que desee almacenar información localmente, o por lo menos en el caché dentro de la aplicación, en lugar de tener una solución basada en servidor, a causa de la, limitada o no, conexión de red”.
4. No generalice: Los CIO deben tomar el rol de Apple y permitir que los usuarios conduzcan sus esfuerzos de aplicaciones móviles de negocios con simpleza. A menudo, van a cargar demasiada funcionalidad en una sola aplicación. Cuando Alsbury echó un vistazo a la aplicación monstruosa del fabricante minorista, recomendó dividir la aplicación en tres aplicaciones especializadas para el iPhone.
Los representantes de ventas del fabricante podrían visitar las principales tiendas minoristas para reunir y presentar datos, como dónde se colocan los productos y la cantidad de inventario que hay en los estantes. Luego discutirá con el gerente de la tienda sobre mejorar las ventas mediante análisis -es decir, que podrían mostrar tiendas similares que mejoraron el rendimiento mediante el posicionamiento de su producto. Por último, los representantes de ventas podrían hacer pedidos de los productos.
Las tres medidas estaban contenidas en una sola aplicación para el iPhone, haciendo la navegación muy incómoda. Mellmo separó estas tres tareas distintas en aplicaciones especializadas. Cada aplicación se puede abrir en cuestión de segundos, y permite que los representantes de ventas hagan lo que tienen que hacer en ese momento.
La idea de la especialización también se aplica a la base de usuarios. Dado que las aplicaciones móviles empresariales deben ser lo más eficaces posible, tanto en las funciones y en los datos, los CIO deben desarrollar múltiples aplicaciones dirigidas a grupos específicos de usuarios en lugar de una aplicación general, que finalmente se convierte en difícil de manejar e inutilizable para todos.
5.Pase un tiempo en la recopilación de requisitos: Los CIO deben estar preparados para pasar mucho tiempo reconociendo lo que los usuarios quieren de una aplicación de negocios de telefonía móvil antes de pasar al desarrollo de aplicaciones. Hable a menudo con los usuarios, tanto antes como durante el desarrollo de pruebas beta. Este es uno de los pasos más importantes en la creación de una solución de la que ellos dependerán. “Si se hace de manera eficiente, estamos hablando de entre dos semanas y un mes de pura definición de los requisitos de los datos”, señala Alsbury.
Recuerde que, acortar este paso puede resultar en una mala experiencia de usuario. La primera impresión es fundamental, especialmente en la adopción del usuario. Será difícil traer de vuelta a un usuario que ha sido “apagado” por una aplicación móvil.
6. No acumule características: Incluso los CIO que entienden el caso de uso especial de móviles y grupos específicos de usuarios, pueden ser víctimas de la corrupción del alcance. Meter una mayor funcionalidad, más datos, más botones, más menús desplegables en una aplicación móvil parece estar en el ADN de un aficionado a la tecnología. “Es un fuerte hábito del cableado”, señala Alsbury.
¿Quiere una prueba? No busque más, Microsoft Excel. Para utilizar la aplicación empresarial de hoja de cálculo, lo más probable es que tenga el pulgar en el manual de usuario y un ecosistema de terceros sobre cómo realizar cada función. Es una desconexión absurda, ya que la mayoría de gente abre Excel y hacen clic en su camino a través del desorden solo para ver un simple pedazo de los datos.
“Hay que tener la disciplina para cortar y cortar y bajar hasta la función base que necesita el usuario en ese contexto móvil”, señala Alsbury.
7. No se preocupe por el retroceso de un usuario: Una aplicación de negocio de telefonía móvil no puede tener todo lo que su contraparte portátil hace. Los CIO toman decisiones informadas sobre qué incluir y qué cortar. Como resultado, tiende a haber una preocupación/expectativa de que los usuarios se molestarán porque algunos datos no estarán disponibles para ellos en la aplicación para el iPhone.
Por lo tanto, ¿deben preocuparse los CIO? No, señala Alsbury. “La mayoría de las veces, es todo lo contrario”, agrega. “Los usuarios en realidad prefieren menos funcionalidades, y TI se sorprende”.
8.En pocas palabras: Más funcionalidad significa una mayor complejidad. Los usuarios no quieren leer un manual de cómo hacer las cosas antes de utilizar una aplicación móvil de negocios para el iPhone, lo que quieren es aprovechar toda la pantalla táctil de una manera sencilla e intuitiva.
Tom Kaneshige, CIO.com