En varias ocasiones he hablado en mi blog y en numerosas entrevistas nuestra visión sobre las amenazas informáticas para la plataforma Mac. La percepción que se tiene es que no hay riesgo ni peligro para estos usuarios, ya que los virus se hacen sólo para plataformas Windows y porque el sistema operativo Mac es más seguro que Windows.
La realidad es que sí hay virus que actúan en entornos Mac. La diferencia estriba en la cantidad de malware que circula si lo comparamos con Windows. Explicarlo es fácil: si eres un cibercriminal con una motivación económica y quieres infectar al mayor número posible de víctimas, ¿cuál sería el blanco ideal? ¿Una plataforma con 100 millones de usuarios, u otra con 1000 millones? La respuesta es obvia.
Además, estoy convencido de que conforme aumente la base de usuarios que utilizan Mac y cuando alcancen una cuota de mercado representativa, los hackers comenzarán a descubrir un apetitoso caldo de cultivo para la distribución de sus infecciones. Me atrevería a decir que incluso encontrarán víctimas desprevenidas, precisamente por la percepción (lejana a la realidad) de seguridad que los usuarios tienen con los Macs. Por lo tanto, en cuanto esto suceda, la situación podría llegar a recordarnos epidemias históricas, como Nimda o Sircam. Sin olvidar que la falta de virus no los hace menos vulnerables al spam o al phishing.
En cualquier caso, es importante señalar que una cosa es que no haya mucho malware específicamente diseñado para Mac, y que, por lo tanto, la posibilidad de infectarse sea menos problable, y otra cosa muy diferente es que los usuarios de Mac no estén contribuyendo (consciente o inconscientemente) en la distribución de amenazas informáticas.
Probablemente sin su conocimiento, a través de ellos, se están infectando otros usuarios de Windows conectados a través de diferentes medios (correos, redes sociales, etc.). Además, tenemos que ser conscientes de que los usuarios Mac suelen tener también instalado, en otra instancia del disco duro, sistemas Windows, o bien distribuciones que permiten la compartición de archivos de uno a otro sistema operativo y en esa partición es casi imprescindible tener un antivirus instalado.
Utilizando nuestra jerga, diríamos que es un vector de infección más. Quizá dos escenarios que nos pueden parecer sumamente reales y cercanos en cuanto a la distribución de malware sean los siguientes: el intercambio de información mediante dispositivos USBs (ya sean llaves de memoria, discos duros, telefonía móvil…) que conectamos tanto a sistemas Mac como a Windows, por un lado, y, por otro, lo que está resultando ser una tendencia en cuanto a ocultación de amenazas como códecs de Mac. Estas situaciones son sólo un ejemplo, pero si pensamos detenidamente en ello, encontraremos numerosos casos donde utilizar una plataforma Mac sin protección es un riesgo, tanto para el usuario como para los entornos en los que éste se mueva.
Por último, del mito de que el sistema operativo diseñado por Apple es más seguro que Windows … hablaremos otro día : -)
Por Juan Santana
CEO de Panda Security