En un interesante giro de la controversia por las patentes que mantienen Apple y Qualcomm, ésta ha decidido solicitar medidas extremas.
CIO AMÉRICA LATINA | Por Elibeth Eduardo | @ely_e
El fabricante de microprocesadores, probablemente, esta forzando la mano para llegar a un acuerdo a la demanda que Apple mantiene en su contra y a su negativa a cancelar la deuda por patentes pertenecientes a Qualcomm.
En vista de esto, el contraataque del fabricante del de microprocesadores resulta extremo, por decir lo menos: Qualcomm se está preparando para solicitar que se niegue la entrada a Estados Unidos de los iPhones que Apple produce en Asia, principalmente en India y China.
La solicitud no la hará en la Casa Blanca (como se podrÃa pensar en forma “inocente”) sino Comisión de Comercio Internacional (ITC, por sus siglas en inglés).
Sin bien la información no está confirmado, la medida podrÃa parecer “polÃticamente correcta” en este momento para el fabricante de San Diego.
Sobre todo porque podrÃa generar una negociación frente a la posición de Apple que la ha demandado en Estados Unidos y amenazado en hacerlo en Corea del Sur donde ya el regulador multó a Qualcomm por abuso de su posición dominante en el mercado.
La ITC es una agencia cuasi judicial en Washington que tiene el poder de bloquear la importación de bienes a Estados Unidos y procesa los casos más rápidamente que los tribunales federales.
Medidas desesperadas
La posibilidad de la acción podrÃa retrasar el lanzamiento del iPhone 8, justo cuando la empresa celebra ganancias récords.
¿Por qué una jugada tan radical? Pareciera una medida “disuasoria” (también “a-lo-Trump”) en vista de que los recientes arbitrajes no han favorecido al fabricante con sede en San Diego.
“Tienen que hacer algo. El mayor riesgo es que otras compañÃas o paÃses digan que tampoco van a pagar. Ese es el peligro de dejar que Apple se salga con la suya”, explicó el analista de Stifel, Nicolaus Kevin Cassidy, al ser consultado para saber por qué una acción tan extrema.
Cabe recordar que la disputa entre ambas compañÃas se debe a que Apple ha demandado como injustas las condiciones de patentes impuestas por Qualcomm.
En estos acuerdos, la empresa cobra un porcentaje del precio de todos los teléfonos inteligentes de alta velocidad con capacidad de datos, sin importar si los dispositivos utilizan sus chips o no.
La disputa empeoró a finales del mes pasado cuando Apple eliminó los pagos de licencia de tecnologÃa a Qualcomm, con sede en San Diego.