El gobierno ruso acaba de solicitar a Apple y SAP, fabricante de un software empresarial que gestiona las operaciones de negocio y relaciones con los clientes, que proporcionen acceso a su código fuente a fin de asegurarse de que sus dispositivos iOS y Mac no sean vulnerables al espionaje. La exigencia también tiene que ver con cerciorarse de que Apple no utilice sus productos como herramientas para espiar.
La petición fue realizada por el ministro de comunicaciones Nikolai Nikiforov, al director general de Apple en Rusia, Peter Engrob Nielsen y al director de gestión de SAP Vyacheslav Orekhov, en la que sugirió a ambas empresas que proporcionaran el acceso al gobierno ruso a sus respectivos códigos fuente.
Esto se suscita después de que el investigador de seguridad, Jonathan Zdziarski, acusara a Apple de la construcción de puertas traseras de vigilancia en los dispositivos iOS con el objetivo de ayudar a las agencias gubernamentales estadounidenses a espiar a los usuarios de sus productos.
Apple negó las acusaciones diciendo que “nunca han trabajado con ninguna agencia gubernamental de ningún país para crear puertas traseras en ninguno de sus productos o servicios”.
No es la única ocasión en la que el gobierno ruso se muestra cauteloso respecto a los productos de alta tecnología fabricados en Estados Unidos. En marzo pasado, el gobierno ruso prohibió a los miembros de su gabinete el uso de iPads y sugirió que se utilizaran en su lugar tabletas de Samsung.