Un nuevo obstáculo para el comercio electrónico de los pequeños retail se ha detectado: la fragmentación operativa.
Aunque Landscape la está relevando en Chile, lo cierto es que afecta por igual a todos los minoristas de la región.
Hecho: muchos analistas pusieron en duda que los pequeños comercios en América Latina tuviesen capacidad para sobrevuvir a la pandemia de Covid-19.
¿Por qué? Porque la reclusión, preventiva pero obligatoria, incentivaba el comercio electrónico y los pagos digitales.
Gobiernos, banca y fintechs buscaron soluciones en cada país para tener la menor tasa de mortalidad de minoristas posible. Menos víctimas para el Covid-19.
¿Se podía regresar al estadio previo pasada la pandemia? Muchos de los comercios que suspendieron sus operaciones esperaron que sí.
Pero lo cierto es que el nuevo consumidor pospandemia ya estaba habituado a las ventajas del comercio y los pagos digitales.
Esto ha obligado a la mayoría de los minoristas y Pymes de la región a realizar esfuerzos crecientes para la transformación digital de su operación.
No obstante, un estudio reciente de la Cámara de Comercio de Santiago (CCS) nos muestra cómo este proceso ha generado un proceso de fragmentación operativa que amenaza a las pequeñas y medianas empresas (PyMEs).
Cambio de hábitos de consumo y sus efectos
El principal hallazgo del estudio puede trasladarse a cualquier ciudad latinoamericana:
60% de las Pymes del país enfrenta desafíos significativos para integrar métodos de cobro digitales, con múltiples aplicaciones, terminales costosos y sistemas de liquidación poco transparentes.
En esencia, el problema es consecuencia de un desencuentro entre los negocios y sus clientes.
El informe revela que casi el 60% de los consumidores prefiere utilizar tarjetas de débito o crédito en lugar de efectivo. Tal tendencia, aumenta la presión sobre los comercios para adaptar sus procesos a las nuevas preferencias.
La brecha entre demanda digital y capacidad operativa se ha convertido en un problema estructural.
“Sabemos que la multiplicidad de apps y equipos encarece y complica el cobro para las Pymes”, señaló el gerente de Producto de HPay, Paolo Soto.
Es por ello que la fintech tiene como objetivo simplificamos el proceso, tanto para los clientes como para los retailers:
- QR
- Links de pago
- Y tarjetas
¿Lo mejor? Todo ello en una sola interfaz. Ello combate, directamente, el problema de la fragmentación operativa.
Además, HPay es una solución de Landscape pensada para mipymes y Pymes pues ofrece una única plataforma para pagos digitales, sin costos de implementación ni suscripción mensual.
Escalar el comercio digital, sin fragmentación operativa
Una de las características más destacadas es su modelo de implementación rápida y sin barreras. Basta con:
- Descargar la aplicación
- Registrar el comercio
- Todo ello permite comenzar a recibir pagos en menos de cinco minutos.
Además, su esquema de comisiones bajas y fijas permite a los comercios proyectar sus ingresos con mayor precisión.
La estructura tarifaria competitiva convierte a HPay en una alternativa viable frente a los modelos tradicionales de adquirencia, que suelen estar vinculados a contratos extensos y comisiones variables.
Cabe destacar que HPay está disponible para iOS, Android y vía web, transformando teléfonos móviles o computadores en puntos de venta. Todo ello elimina la necesidad de hardware adicional.
La solución no solo apunta a simplificar el cobro: también busca fortalecer la resiliencia financiera y operativa del pequeño comercio.
“Con comisiones competitivas y certificación PCI DSS, ofrecemos una experiencia segura, ágil y viable para cualquier PyME, sin importar su tamaño ni ubicación”, señaló Paolo Soto, gerente de Producto de HPay.
El ejecutivo destacó que la certificación PCI DSS garantiza que los datos de pago se gestionan bajo estrictos protocolos de seguridad. Mientras, la liquidación simple y transparente permite a los negocios manejar su flujo de caja sin sorpresas ni demoras.
Esto se traduce en tres beneficios claves que evitan la fragmentación operativa:
Liquidez controlada
Las bajas comisiones y la ausencia de costos ocultos mejoran la capacidad de planificación financiera.
Gestión unificada
El comerciante administra todos sus medios de pago desde una única interfaz, sin necesidad de alternar entre aplicaciones o dispositivos.
Reducción de fricción comercial
El consumidor puede pagar con el método que prefiera, mientras el comercio mantiene una experiencia fluida y sin interrupciones.