Los adultos crean las reglas, políticas, leyes y tecnologías que los joven usan. Los padres son las figuras más obvias de la categoría.
Por: Laszlo Beke | Presidente de la Junta Directiva de Beke Santos
La adolescencia es una época de curiosidad en la que se enfrentan y descubren muchas cosas que van más allá de la educación familiar.
En este mundo del Internet y de los teléfonos inteligentes tenemos a los adultos – en ocasiones frenéticamente – transmitiendo a los adolescentes mensajes como:
- Piensa antes de postear
- No hagas sexting
- Enfrenta a los cíberbullies
- Defiende aquello en lo que crees
- No te involucres
- Las discusiones en línea son una pérdida de tiempo
- Se honesto
- Se amable
- Deja de usar el teléfono
- Tú eres lo que posteas: hoy, mañana y en el futuro
Existe un excelente material sobre este tema de las reconocidas autoras Emily Weinstein y Carrie James, del cual compartimos algunas ideas.
Esos mensaje de los adultos son bien intencionados y muchos, totalmente, ciertos.
Provienen de adultos que, verdaderamente, se preocupan por los jóvenes, así como quieren que estén a salvo y en el camino a una vida exitosa.
Sin embargo, dichos mensajes no son suficientes: se quedan cortos.
No es que sean inexactos o incorrectos: simplemente no son suficientes.
Frecuentemente, producen el resultado opuesto al deseado, amplificando la ansiedad y sin aclarar aquello que los adolescentes pueden o deben hacer cuando aparecen los retos.
Hoy en día los adolescentes requieren más que principios generales o frases de alertas presas del pánico.
Cultura digital
¿Qué se necesita entonces? Es cierto que se requiere de escuelas que creen espacios para la educación del alfabetismo digital.
También de diseñadores de la tecnología y políticas que prioricen el bienestar de los jóvenes.
Igualmente se requiere de adultos interesados y preocupados que:
- Estén alertas frente a los dilemas y disyuntivas digitales
- Establezcan límites útiles
- Y que ofrezcan empatía, conexión y validación
Todo esto es crucial pero, aún así, no es suficiente.
Es necesario también encontrar formas para apoyar el sentido de agencia o autonomía.
Se trata de la conciencia subjetiva de la persona que está iniciando, ejecutando y controlando sus propias acciones volitivas en el mundo.
Los psicólogos – desde hace bastante tiempo para acá – han reconocido que a los individuos les va mucho mejor cuando creen que sus acciones pueden influir sobre lo que ocurre y transformar un resultado a través de su comportamiento, cuando tienen agencia o autonomía.
En muchas áreas de la vida digital se evidencia la lucha por parte de los adolescentes por sentirse y estar en control. Por lograr tener agencia digital.
Conexión e interacción
Para los adolescentes existen beneficios muy reales en la vida digital. Las redes sociales conectan con los adolescentes cuando:
- Están en la etapa de desarrollo
- Cuando están preparados para la autoexpresión
- Para la exploración de sus valores
- De sus intereses
- Para conectar con sus iguales
- Y cuando tienen curiosidad amplia para el mundo extendido
La lucha se manifiesta cuando intentan regular sus hábitos digitales, enfrentando las poderosas atracciones del diseño de las redes, así como sus propias sensibilidades asociadas al desarrollo.
Esto sale a la superficie en las seguidillas que exige Snapchat, en las cuales el joven se ve forzado a realizar intercambios que, probablemente, preferían no hacer.
Pero, también, cuando:
- Alguien les solicita una foto sin ropa y sienten que cualquier decisión que tomen (incluso decir que “no”) termina siendo un perder-perder.
- Les importa un amigo, pero también quieren desconectar.
- Les preocupa un tema público, pero reconocen los riesgos y peligros de postear y también de mantenerse callados.
- Se sienten atrapados dentro de filtros no deseados, que determinan lo que ellos ven.
- Se les indica que cuiden sus huellas digitales, pero no pueden evitar que sus compañeros coloquen en Internet aquello que ellos nunca quisieran ver allí.
- Les inquietan los riesgos de privacidad, pero enfrentan la realidad que muchos de los riesgos están fuera de sus manos.
Para ayudar a los adolescentes, el psicólogo Albert Bandura ha identificado tres tipos de agencias. Veamos la más importante para esta reflexión.
Agencia via proxy
La agencia vía proxy es aquella donde intervienen, en mayor grado, los adultos. Este tipo de agencia reconoce, que por cuenta propia – incluso cuando colaboran entre ellos – los adolescentes solo tienen control relativo sobre sus circunstancias.
Los agentes vía proxy son, típicamente, los que detentan más poder y pueden ejercerlo en nombre de otros para apoyar y sostener su agencia.
Los adultos son quienes crean las reglas, las políticas, las leyes aplicables e incluso las tecnologías que los joven usan y, por ello, los agentes proxy son determinantes en el contexto tanto de las oportunidades como de los riesgos digitales.
Los padres son las figuras más obvias en esta categoría, por ser quienes toman las decisiones diarias que permiten y limitan el acceso digital.
También están los adultos que tienen roles guardianes cuando toman decisiones sobre el uso de dispositivos digitales en las escuelas, sobre la otorgación de becas y en la contratación de personas.
Los adultos pueden ser los recipientes de la evidencia de transgresiones digitales.
Aquellos que trabajan en educación, frecuentemente, tienen la tarea de manejar casos, afectando a estudiantes bien sea un cíberbullying persistente o un desnudo compartido con una persona que ha sido distribuido en toda la escuela.
Se incluyen aquí aquellos que trabajan en las tecnológicas: diseñadores que comparten la complicidad de crear condiciones que pueden afectar la agencia personal de los jóvenes, aun cuando esto no haya sido intencional.
Independientemente del rol en el cual se encuentren los adultos, se necesita considerar:
- ¿Si las decisiones que se tomen, apoyan o comprometen la agencia personal de los jóvenes y su bienestar?
- ¿Dónde, cuándo y cómo se debe intervenir para trastocar los dispositivos, las apps, las normas, las políticas y leyes existentes?
- ¿Cómo diseñar para aumentar la agencia?
- ¿Cómo identificar las consideraciones sobre la susceptibilidad y la equidad cuándo se adoptan esas actitudes?