El Open Banking se ha abierto camino más allá de la industria financiera: en tiendas departamentales su papel se ha revela como de gran valor.
Por Nick Grassi
Co-CEO de Finerio Connect
El Open Banking, nombre que recibe el intercambio de información entre entidades financieras y no financieras, se ha posicionado como un elemento crucial para distintas esferas de la vida diaria pues su implementación no sólo se limita al sector financiero, sino que se ha extendido a otros ámbitos como la industria alimentaria, automotriz y hasta la industria del entretenimiento.
Desde la concepción de su nombre, el Open Banking ha buscado ofrecer una alternativa a la manera de concebir a la banca tradicional.
Uno de los objetivos que persigue es la inclusión financiera más allá de la bancarizacion.
Esto se traduce en herramientas, productos y servicios más asequibles que impactan en la calidad de vida de los usuarios.
Cabe destacar que el Open Banking ha cambiando para siempre la manera en que entendemos el mundo.
Su preocupación por la gente, al mismo tiempo que por las empresas, es genuina y le permite resolver problemas de formas mucho más prácticas y económicas.
Por ello, su alcance se extiende más allá del conquistado por la banca tradicional.
El Open Banking en la vida cotidiana
La banca abierta no sólo responde a los intereses de una única industria, sino que se fortalece al satisfacer las necesidades de más sectores que han sido fundamentales a raíz de la pandemia por Covid-19 como, por ejemplo:
- El comercio electrónico
- Las tecnologías de la información
- La seguridad social, etc.
Un ejemplo de cómo el Open Banking se ha abierto camino más allá de la industria financiera es su integración en tiendas departamentales, en las cuales su papel es de gran valor pues, gracias a su implementación, es posible satisfacer las necesidades de los consumidores.
Estas empresas utilizan la banca abierta para ofrecer a sus clientes productos acorde a su:
- Capacidad de pago
- Historial crediticio
- Y, por supuesto, sus intereses y gustos
Este proceso permite brindar a los usuarios una experiencia personalizada que, por un lado, mejora la satisfacción del cliente y, por otro, permite a la empresas tener ahorros en tiempo y costos.
Otro de los sectores favorecidos es el e-commerce, ya que todas las transacciones de este mercado se realizan a través de interfaces digitales que hacen uso de las herramientas del Open Banking.
De acuerdo con la Asociación Mexicana de Venta Online (AMVO), en 2021 el comercio electrónico creció un 81% en comparación con el 2019.
El éxito del comercio electrónico responde a diversos factores de los que los usuarios se ven beneficiados, tales como la reducción de los costos y tiempo.
Por ello es que decimos que la banca abierta nos permite crear entornos comerciales mucho más competitivos.
Algunos otros productos que se han visto beneficiados por la implementación de productos derivados del Open Banking son:
- Los dispositivos móviles como teléfonos y tabletas
- Las tarjetas de crédito y débito
- Los seguros de auto
- Préstamos hipotecarios
- Y muchos otros créditos
Pero el Open Banking no se detiene ahí. Su alcance también se extiende a la industria del entretenimiento, al estudiar la forma en que los usuarios consumen productos culturales en plataformas de reproducción vía streaming.
Por ejemplo, la elección de películas, series, podcast y otros productos audiovisuales podría definir las promociones, ofertas y recomendaciones que reciben al contratar cualquier plataforma.