A pesar de la pandemia, es importante una planificación del negocio que se apalanque en la tecnología, para facilitar un mundo más auténtico, resistente y humano.
En los últimos meses hemos podido observar cómo innovar y transformarse digitalmente ha sido fundamental para muchas industrias y empresas. Hoy es posible afirmar que el mundo no volverá a ser el mismo. Por esta razón, es vital dejar de mirar hacia atrás y hacer una planificación del negocio, par ael futuro de las empresas. A medida que la sociedad vuelva a la normalidad, es fundamental adaptarse a las nuevas exigencias. Para ello, será imperativo adoptar nuevas tecnologías que permitan crear una mayor resiliencia operativa.
“Las organizaciones deberán volver a evaluar y priorizar sus operaciones comerciales y sus necesidades tecnológicas, considerando que los sistemas, procesos y conocimientos de datos que tenían antes de la pandemia ya no son suficientes o relevantes. Mejorar las habilidades y capacitar a los empleados también será clave para abordar cualquier brecha de habilidades digitales y construir una fuerza laboral más resiliente”, señala Sergio Morales, Gerente General de CoasinLogicalis.
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Asimismo, el ejecutivo comparte cuatro claves que ayudarán a las compañías a sobrellevar el escenario actual de mejor manera y permitirán la eficiente continuidad del negocio.
1. Más enfoque en la optimización de costos
A medida que disminuyan las restricciones, un período de optimización de costos será esencial para que las organizaciones garanticen que las medidas de emergencia implementadas sigan siendo sólidas y adaptables para el futuro.
Las tecnologías que brindan ganancias y ahorros de productividad, ofrecidos bajo modelos de pago por uso, como las soluciones en la nube, serán una prioridad para las empresas. La tecnología juega un papel clave en la construcción de esa resiliencia y permite a las empresas competir de manera diferente después de una pandemia, con énfasis en la adaptabilidad y la agilidad.
2. Capacidad y capacitación de los empleados
A medida que muchas empresas restablecen sus estrategias y se transforman hacia modelos de negocios digitales para mejorar la resiliencia, las empresas y ejecutivos se enfrentan a una escasez de habilidades y experiencia digital. Hay una clara necesidad en muchas economías en expansión por adquirir las habilidades digitales necesarias y, sin embargo, como muestra un informe reciente de las Naciones Unidas, solo la mitad de la población de los países en desarrollo tiene acceso a Internet.
Con el impulso de llevar la tecnología en línea a más usuarios del mundo, surgirá una necesidad aún mayor de habilidades y capacidades digitales.
3. Continuidad en la planificación del negocio
La pandemia dejó a la vista muchas falencias en los planes de continuidad de negocios de las organizaciones, a todo nivel y tamaño de empresa. De hecho, pocas habían planeado un período prolongado de interrupción, suministro y entrega; o restricciones tan estrictas en la movilidad de la fuerza laboral, o la necesidad de asegurar los recursos a sus trabajadores, pero ahora en forma remota. Algo que se ha hecho mas presente también son los nuevos riesgos asociados a la protección de los datos e información sensible de las empresas, los que debido a la gran hiper conexión de usuarios internos, de proveedores y clientes, abren nuevos y grandes flancos que proteger, resguardar y prevenir,
Los líderes empresariales ahora deben analizar de manera crítica las lecciones aprendidas de la respuesta durante el COVID-19. Además de planificar mejor para posibles futuros bloqueos inevitables, las organizaciones también deben considerar la oportunidad que se presenta para remodelar su cartera de productos y servicios, considerando retirar, reducir, continuar con normalidad o reinventar.
4. Más enfoque en la construcción, previsión y predicción
Los datos y el análisis han demostrado ser indispensables durante la pandemia: ayudaron a generar resiliencia y crecimiento empresarial. Las mentalidades y los comportamientos han cambiado con un mayor deseo de obtener información sobre los acontecimientos actuales y los posibles escenarios de crisis basados en análisis predictivos.
Las prioridades comerciales del uso de la analítica se han centrado en el bienestar de los empleados; informar decisiones estratégicas y financieras; gestionar la seguridad, los riesgos y los costos de la cadena de suministro; y, por supuesto, involucrar a los clientes.
“Sin duda, esta crisis sanitaria es sinónimo de muchos desafíos, pero también de oportunidades. Para ser más competitivo y rentable en un mundo cada vez más digital, será fundamental que las empresas mejoren sus procesos, su nivel tecnológico y capacidades digitales humanas. La pandemia obligó a muchos a implementar distintas soluciones que traerán muchos beneficios en el corto, mediano y largo plazo. La pregunta es qué sucederá con los que no lo han hecho aún.”, concluye Morales.