Las organizaciones empresariales están demostrando que es posible hacerse digital en sólo semanas en lugar de años. ¿Qué ha cambiado? Compartimos algunos hitos históricos.
Por: Zeo Solomon, Fundador y Chief Strategy Officer de Avenue Code. Foto: Anton Uniqueton en Pexels
Cuando la economía de los Estados Unidos se derrumbó en 2008, la mayoría de las empresas respondieron pasando a la tecnología digital. La automatización significó, en concreto, un ahorro de costos. Entre 2008 y 2013, las empresas minoristas de Fortune 100 fueron pioneras en soluciones de comercio electrónico que sirvieran de modelo para su transformación digital.
La historia de la re – evolución
De 2014 a 2017, Europa y América Latina se pusieron al día con la digitalización, empezando por el comercio electrónico, mientras que, en los Estados Unidos, las FinTech empezaron a seguir el ejemplo.
Entre 2018 a 2019, los últimos los grandes jugadores de la industria automotriz, manufacturera e incluso de gestión de residuos comenzaron sus propias experiencias de transformación digital, automatizando los procesos para seguir siendo competitivos.
Gracias a las mejoras tecnológicas constantes, y a una mayor aceptación por parte de los líderes, en la primera década del siglo XXI, las transformaciones digitales que solían llevar a las organizaciones empresariales de 2 a 5 años en 2008 sólo tardaron 1-2 años en 2019.
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COVID-19: Hazte digital o muere
Llegó el año 2020, y de la noche a la mañana, el mundo se encontró refugiado en su casa. Las tendencias digitales que añadieron valor comercial en el pasado se volvieron indispensables para la viabilidad del mercado. El trabajo a distancia se convirtió en obligatorio. El servicio de atención al cliente en línea se volvió imperativo. La nube se volvió crucial.
En el comercio minorista, las ventas en línea subieron un 76% año tras año (Comercio Digital 360). En educación, más de 1.500 millones de estudiantes se vieron afectados (UNESCO), lo que dio lugar a un cambio global hacia el e-learning, con algunos proveedores de aprendizaje desplegando más de 100.000 servidores en la nube en sólo 2 horas (Foro Económico Mundial). En el sector de la salud, los Centros de Servicios de Medicare y Medicaid vieron 10,1 millones de beneficiarios recibiendo servicios de telemedicina desde mediados de marzo hasta principios de julio (HHS.gov). En resumen, las empresas se enfrentaron a un desafío: pasar a lo digital o morir.
Y el mundo pasó la prueba. Ahora los equipos se están digitalizando en 4-8 semanas y trabajando desde casa, no sólo con una eficiencia comparable, sino con una eficiencia mejorada.
La transformación acelerada
La transformación digital solía comenzar con los departamentos de tecnología y lentamente se impregnaba en todo el negocio. Ahora son las unidades de negocio las que demandan las reformas digitales. Solíamos comenzar con frutos de bajo costo como procesos iterativos y MVPs, y poco a poco se abrían caminos de implementación a la totalidad de la organización.
En la actualidad las empresas están digitalizando todo el flujo de valor de una sola vez. Solíamos hacer que un equipo se adaptara a la vez. Ahora organizaciones enteras están compitiendo por una rápida adaptación. Pasamos de convencer a las finanzas de que lo digital era una inversión que valía la pena a las finanzas que impulsan la transformación digital.
La nueva normalidad: un ADN digital
¿Qué cambió para hacer posible la transformación digital acelerada? La respuesta es nosotros. COVID-19 nos ha obligado a estar abiertos al cambio porque el cambio nos da un camino a seguir. Ahora sabemos que la transformación digital es la respuesta, y exigimos ir a lo digital rápidamente porque sabemos que es posible.