Los mejores líderes de TI tienen un poderoso rasgo raramente asociado con los ejecutivos seniors: la humildad
CIO.com | Por Dan Roberts y Brian P. Watson
Desde hace mucho tiempo el CIO Steve Bandrowczak tiene una gran: se ha paseado por grandes organizaciones mundiales, habla en los más importantes escenarios, y ha manejado resultados impresionantes.
Pero todavía dedica 30 minutos de cada día para aprender algo nuevo. Eso es un gran compromiso para un ejecutivo trotamundos que duerme más noches de las que pueda contar a 35.000 pies de altura.
¿Por qué es tan diligente con el aprendizaje continuo? Bandrowczak reconoce que nunca lo sabrá todo, pero que siempre busca mejorar. Su curiosidad es una herramienta formidable.
Después de muchos años como CIO de empresas como Nortel, Lenovo y DHL, Bandrowczakahora es el nuevo vicepresidente senior de Global Business Services en Hewlett-Packard.
Él es uno de los varios CIOs perfilados en nuestro libro, Confesiones de un CIO exitoso, que demuestra una poderosacualidad del liderazgo que rara vez se menciona: la humildad. En esta era digital dominada por los selfies (¡mírame!) y lleno de líderes autodefinidos como “visionarios”, es el momento para un poco de introspección colectiva.
Los estudios han encontrado que la humildad es un valioso activo en un ejecutivo. Un estudio de septiembre de 2013 realizado por un equipo de la Escuela de Negocios Foster de la Universidad de Washington halló que los trabajadores que pensaban que sus gerentes eran más humildes estaban más comprometidos en su trabajo y menos propensos a buscar empleo en otros lugares. Un estudio de mayo 2014 por Catalyst tuvo resultados similares.
¿Vas a abrazar el aprendizaje permanente? ¿Hablarás abiertamente sobre tus fracasos? ¿Buscarás el consejo en tu red de colegas?
Durante las entrevistas a los directores de TI para nuestro libro resultó refrescante que los mejores líderes comparten este rasgo. Sí, son seguros, pero no impulsados por sus egos.
Hay maneras fáciles de detectar un líder humilde. Por un lado, habla abierta y honestamente sobre el fracaso. Wayne Shurts, director de tecnología de Sysco, inicia las discusiones sobre liderazgo hablando de errores. Los resultados de un fracaso – al principio de su carrera en Nabisco – están “arraigados en mi alma”, dice Shurts.
El CIO humilde también enfatizará que la importancia de su gente es tanta como la suya. Shurts objeta culturas corporativas donde los trabajadores de campo son meros protegidos del personal de la sede corporativa. Él piensa que su gente es más valiosa para la compañía que él.
Los líderes humildes también saben que necesitan apoyarse en el asesoramiento y consejo de otros. Cuando Carol Zierhoffer fue CIO de ITT tenía que hacer un giro de 180 grados para pasar de la centralización de los sistemas y procesos del conglomerado a un proceso descentralizado que permitiera a ITT dividirse en tres empresas.
Zierhoffer sabía que no podía hacerlo sola. Una de sus primeras decisiones fue solicitar ideas de compañeros en empresas como Motorola, Cardinal Health y Altria, todos los cuales habían manejado escisiones corporativas. Ella recibió consejos acertadosno sólo acerca de las operaciones de TI sino, también, de cómo retener a su mejor talento.
¿Pero cuál es la evidencia más llamativa de un líder humilde? Cuando sus organizaciones tienen éxito estos CIOs hablan de “nosotros” y “nuestro”. Pero, cuando algo sale mal elloshablan de “mi” y “yo”.
El problema es que muchos otros líderes de negocios no lo hacen. Nos sobrecoge la frecuencia con la qué nos encontramos con ejecutivos que son orgullosos y engreídos.
Las personas humildes tienden a ser más simpáticas y respetables, cualidades que no se pueden comprar. Mientras que mucha gente se pregunta: “¿Qué hay en ella que me sirva?”, los líderes humildes preguntan: “¿Cómo puedo ayudarte?”
¿Usted va a abrazar el aprendizaje permanente? ¿Hablará abiertamente y con confianza acerca de sus fracasos? ¿Buscará el consejo de su red y dará asesoramiento sin esperar nada a cambio?
Esas son sólo algunas de las preguntas actuales que los aspirantes a líderes deben hacerse a sí mismos. Como Sheleen Quish, otro gran CIO nos dijo recientemente: “no pierda su humildad en el trabajo. La ‘C’ en ‘CXO’ no significa ‘celebridad’ “.
Dan Roberts es CEO de Ouellette y Asociados. Brian P. Watson escribe y habla sobre el liderazgo de TI.
Traducido por Elibeth Eduardo