Es lo que ha declarado un ejecutivo de Dell, quien no ha dejado en muy buen lugar al iPad al considerarlo un dispositivo que no puede ser utilizado en una empresa diversa, abierta y conectada, donde las cosas que debierán ser más sencillas se convierten en bastante complejas.El responsable mundial de marketing de Dell, Andy Lark, en una entrevista con CIO Australia, describió al iPad como demasiado caro, cerrado y complejo para competir frente a frente con Android.
“No podría estar más feliz, porque Apple ha creado un mercado y ha conseguido que la gente se entusiasme con estos nuevos productos, pero a más largo plazo, los sistemas abiertos, capaces y más económicos, ganarán la batalla a los sistemas cerrados, caros y propietarios”, declaró Lark. De hecho, este responsable continuó con sus críticas a este tablet, pues considera que no es válido para los usuarios empresariales.
Dell tiene su propia alternativa al iPad, el Streak. “Apple es genial si tienes mucho dinero y vives en una isla. Pero no lo es tanto si tienes que utilizarlo en una empresa diversa, abierta y conectada, entonces las cosas más sencillas se convierten en bastante complejas”.
Lark afirma que el acercamiento de su compañía será más atractivo para los usuarios profesionales, citando lo que denomina la estrategia “multisistema operativo”. “Ofreceremos Windows 7 con Android Honeycomb y estamos realmente emocionados con ello. Pensamos que dar a la gente esa posibilidad es muy importante”.
Recientemente, Dell presentó un tablet Windows 7 con una pantalla de diez pulgadas, especialmente pensado para usuarios empresariales. Previamente, la compañía no consiguió mucho éxito con su Streak de cinco pulgadas, un cruce entre un smartphone y un tablet.
Lark también declaró que otro de los fallos del iPad es su precio. “Un iPad con teclado, ratón y carcasa significa un gasto de más de 1.000 dòlares, es el doble de lo que deberías estar pagando. No es factible”.
Aunque Apple debería encontrar cierto consuelo al saber que la crítica punzante de Lark no iba solamente dirigida al iPad. También mostró su descontento con la conexión Wi-Fi del hotel Sheraton en el que se hospedaba en Sydney, pues consideraba que era muy cara y que publicó en Internet a través de su iPhone, de Apple.