La empresa Intel apuesta a mejorar las redes para los 50.000 millones de objetos conectados que tendrá el mundo en 2019.
En un mundo en que la demanda de PCs y tabletas puede seguir cayendo por un tiempo, las empresas tienen que reinventarse hacia nuevos negocios si quieren sobrevivir.
Algunas lo tienen claro y han venido adelantando en ello como la empresa Intel que ha decidido invertir para poder liderar la transformación en el apartado de las redes donde son aspectos claves avanzar en el campo del open source y los estándares de las mismas, apostar por arquitecturas y ecosistemas de redes abiertos, y colaborar con los usuarios finales.
Todo ello supone, en principio, contar con una robusta tecnología de redes para la transmisión de datos en la nube. Esto es imprescindible pues los análisis del mercado y uso de Intel Labs y otros investigadores apuntan a que cada minuto se envían 204 millones de correos electrónicos y se cargan en internet 300 horas de vídeo.
Autopistas atascada
De allí que la [otrora fluida] “autopista de la información” presente cada día más problemas de tráfico, propias de vías extremadamente concurridas.
Desde Intel recuerdan que en el futuro el tráfico de datos será todavía mayor, ya que de cara 2019 se espera que ascienda a los 2 zettabytes debido a que habrá más de 50.000 millones de dispositivos conectados a la nube.
Este indicador señala que es indispensable que las empresas estén preparadas para que sus redes puedan gestionar estos volúmenes de información.
La oferta de Intel
Para liderar lo que se estima constituirá una nueva revolución digital Intel ha lanzado el nuevo procesador XeonD, pensado especialmente para funciones de virtualización de red, y que:
- Cuenta con 8, 12 y hasta 16 núcleos, lo que lle permite mejorar en 5,6 veces el rendimiento con cargas de trabajo de red.
- XeonD permite mejorar la experiencia de los usuarios cuando están viendo contenidos de vídeo.
- Dispone de más de 50 diseños que pueden emplearse en campos como las redes, el almacenamiento, el Internet de las Cosas y el almacenamiento.
Gracias a la alta densidad de los núcleos y sus medidas, la nueva familia XeonD también ayudará al desarrollo de las redes 5G y aumentará su potencial y capacidades, respaldado con el constante monitoreo Intel Security de los retos de seguridad que suponen todas estas conexiones.
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