IEEE Computer Society nombró la Mobile Cloud como una de las tendencias tecnológicas más prometedoras para el 2014. Según IEEE, los dispositivos móviles se encuentran limitados por su memoria, poder de procesamiento y vida de batería, pero al ser combinados con la nube, el almacenamiento y procesamiento de información puede llevarse a cabo fuera de los dispositivos.
El almacenamiento es una de las más grandes limitantes para la mayor parte de los dispositivos móviles. Los smartphones suelen contar únicamente con 8GB o 16GB de almacenamiento, mientras que las tablets suelen tener 32GB, siendo 128GB el máximo. Las ultrabooks y notebooks están alejándose del almacenamiento en disco duro para pasar a los SSD (solid state drives), pero aun en estos casos el almacenamiento suele ser de 128GB o 256GB.
Por otro lado, el almacenamiento en la nube es prácticamente infinito. Box, Dropbox, SkyDrive y Google Drive pueden agregar gigabytes o incluso terabytes de información al servicio existente y se puede tener acceso a la información desde cualquier lugar, siempre y cuando se esté conectado al internet.
Además del incremento en la capacidad de almacenamiento, en caso de robo o pérdida, la información seguirá en la nube, por lo que la reciente tendencia BYOD (bring your own device) podría verse beneficiada enormemente por la Mobile Cloud.
IDC ha denominado la Mobile Cloud como la “Tercera Plataforma”, que permitirá un mejor acceso y sincronización de información, mayor escalabilidad y confiabilidad, y la habilidad de colaborar y acceder a aplicaciones de negocios desde prácticamente cualquier lugar.
A pesar de que los móviles y la nube aún tienen mucho camino que recorrer por separado, la Mobile Cloud cambiará la manera en la que llevamos a cabo nuestras tareas diarias a través de los dispositivos móviles.