Las grandes empresas en América Latina y Asia-Pacífico han adoptado con fuerza el paradigma de la computación en la nube, mientras que sus contrapartes europeas y estadounidenses se mantienen conservadoras si se trata de colocar datos en la nube.
Un estudio realizado por Tata Consultancy Services (TCS) – el que contó con la participación de altos directores y ejecutivos de TI de más de 600 grandes empresas de todo el mundo, la mayoría con más de mil millones de ingresos – revela que si bien las aplicaciones de nube aún representan la menor parte del universo de aplicaciones corporativas, las empresas de América Latina y Asia-Pacífico lideran en la proporción de aplicaciones alojadas en la nube. Esto, en relación al total de sus aplicaciones.
En promedio, las compañías de Latinoamérica tienen casi dos quintas partes (39%) del total de sus aplicaciones en la nube. Asia-Pacífico le sigue de cerca con más de una cuarta parte (28%). En contraste, menos de una quinta parte (19%) del promedio de las aplicaciones de compañías estadounidenses se encuentran basadas en la nube. En Europa, la cifra se acerca a una décima parte (12%).
Las proyecciones indican que para el 2014 las aplicaciones en la nube serán predominantes. Se especula que la proporción para las empresas en América Latina alcanzarán un 54%, seguida de Asia-Pacífico con un 52%, Estados Unidos con un 33% y Europa con un 24%.
El estudio indagó sobre los factores que conducen a que las empresas decidan realizar el cambio, dejando su infraestructura física para alojar sus aplicaciones en la nube. Los resultados arrojaron que las empresas que han dado el salto cuentan con mayores ventajas competitivas y reportan mayores ganancias.
N Chandrasekaran, CEO y Director General de Tata Consultancy Services, aseguró: “Hemos llegado al punto de inflexión de la computación en la nube, y no hay vuelta atrás. Las aplicaciones basadas en la nube son ya una parte sustancial de la gran infraestructura de TI corporativa, y los primeros beneficios obtenidos son demasiado importantes para ignorarlos. Hay un amplio margen para el crecimiento de las economías desarrolladas y emergentes, y creemos firmemente que la computación en la nube va a seguir abriendo oportunidades para las empresas a través de muchas y variadas funciones”.
Por otro lado, la investigación reveló que las compañías en Estados Unidos y Europa siguen siendo especialmente conservadoras en su enfoque sobre la adopción de la nube debido al temor por la violación de la seguridad de datos. Especialmente aquellas aplicaciones que se alojan en nubes públicas. Sólo una quinta parte (20%) de las empresas estadounidenses y europeas han considerado o considerarían seriamente la posibilidad de colocar sus aplicaciones más críticas en las nubes públicas. Sin embargo, dos terceras partes (60%) de las compañías estadounidenses y casi la mitad de empresas europeas (48%) consideran la posibilidad de tener sus principales aplicaciones en nubes privadas. También las empresas en Europa y Estados Unidos mostraron renuencia a poner las aplicaciones con datos de clientes en la nube.
Cabe destacar que las funciones de negocio de cara al cliente son las más consideradas a lo largo de las cuatro regiones que participaron en el estudio. De este modo, las áreas de mercadotecnia, ventas y servicios capturan por lo menos dos quintas partes del presupuesto. Los primeros resultados sobre aplicaciones en la nube son impresionantes. Las empresas están aumentando el número de aplicaciones estándar en los procesos empresariales, reduciendo así los ciclos de tiempo para aprovechar al máximo los recursos de TI, reduciendo los costos de TI y lanzando un mayor número de nuevos productos y procesos. En términos de la industria, los servicios de salud, piezas para automóviles y cómputo están liderando la nube.
En términos de la motivación para el cambio, la reducción de costos de TI resultó un factor importante para las empresas a nivel mundial, sin embargo, la necesidad de simplificar y acelerar los procesos fue aún mayor. Mientras que en Estados Unidos y Asia-Pacífico dan mayor relevancia a la estandarización de aplicaciones de software y procesos de negocio, en Europa y América Latina se centran en la posibilidad de modular los sistemas hacia arriba o hacia abajo de forma más rápida.