El salario y la negociación de la totalidad de la oferta de trabajo no son lo mismo, como dice el profesor Deepak Malhotra, en un artículo para la revista Harvard Business Review. Pero, por desgracia, muchos buscadores de trabajo creen que la negociación salarial y negociar una oferta de trabajo son sinónimos.
“Gran parte de su satisfacción por el trabajo vendrá de otros factores que usted puede negociar”, dice Malhotra en el artículo. “Tal vez, incluso con más facilidad que el sueldo”, añade.
“Si usted centra toda la negociación en únicamente el aspecto salarial, su potencial empleador va a preguntarse cuáles son sus verdaderas motivaciones, ” dice Bardaro. “¿En realidad va a preocuparse por el futuro y el éxito de la empresa y en su conjunto?; ¿Vas a trabajar duro para contribuir al crecimiento y desarrollo de la empresa? Es por eso que usted debe también centrarse en otro tipo de beneficios. Esos otros beneficios pueden ser cosas como el tiempo de vacaciones, arreglos flexibles sobre el horario de trabajo, cuidado de los niños, reembolso de matrícula y así sucesivamente”.
Un potencial empleador considera su sueldo o su inversión monetaria, como un activo empresarial, dice Gillis. “Si usted está centrado únicamente en los beneficios financieros, van a empezar a preguntarse si realmente usted es una buena escogencia, por eso es importante que demuestre interés en ayudarles a entender el valor total de su trabajo en el futuro empleo “.
“Si usted no puede conseguir el salario que usted desea en la primera entrevista, busque una posible revisión salarial en seis meses“, dice Gillis. “En esos seis meses, usted necesita centrarse en demostrar su inmensa capacidad de trabajo y una entrega, más allá de lo que se espera de usted, y entonces que tomen en cuenta que usted es digno del aumento de sueldo”, dice.
También puede pedir un mejor cargo, o beneficios como más tiempo de vacaciones, gastos de representación, tarjeta corporativa, viáticos para sus desplazamientos, membresías a organizaciones profesionales o asociaciones comerciales, gastos de reubicación. Lo importante, según Gillis, es ser creativo.
Esto puede demostrarle a su empleador que usted no solamente invirtió en trabajar para ellos, sino que además es un gran solucionador de problemas y está dispuesto a perseverar, aun cuando las condiciones no sean las ideales.
Por último, no olvide sonreír, dice Gillis. Si bien las negociaciones pueden parecer confrontacional, el objetivo es llegar a un entendimiento común, de beneficio mutuo, dice.
“El trabajo del empleador es conseguir el mejor talento por la menor cantidad de dinero. Su trabajo es exactamente lo contrario”, dice Gillis.
“Cuando se llega a esto, ambos son personas, y el objetivo es llegar a un terreno común. La compañía le hizo a usted una oferta ya, por lo que quieren que trabaje para ellos, y ellos creen ser la esperanza de que usted quiera a trabajar para ellos, también. Sólo tienes que hacer que sea una victoria para ambas partes “, dice.