¿Qué sería de Internet sin los centros de datos? Hoy nadie puede responder a esto. La red de redes no es posible sin ellos.
En la pandemia se conectaron por primera vez 800 millones de personas. Los CDD lo hicieron posible.
Una de las cosas que descubrió el mundo durante la pandemia fue cuáles eran sus puntos de dolor. Internet no lo fue, como lo demostró la mudanza masiva al trabajo remoto.
Cierto que, en aquel momento, más de la mitad de la población mundial no tenía acceso a Internet. Probablemente, esta cifra no haya variado demasiado.
Sin embargo, 800 millones de personas de personas pudieron conectarse a Internet por primera vez durante ese período, fruto de la necesidad de llegar a la mayor cantidad de personas posibles en muy poco tiempo.
Los centro de datos (CDD) y, en general, la infraestructura crítica de Internet paso a ser prioridad y sus profesionales se sumaron a la lista del personal esencial junto con el personal de:
- Salud
- Socorristas
- Seguridad
- Transporte
Contaban aquí, también, quienes laboran en las industrias de alimentos, energía, servicios y electricidad, así como telecomunicaciones.
Ninguna de estas industrias podía parar. Y los centros de datos, en esas condiciones, fueron esenciales para todas ellas.
Después de la pandemia
Contrario al pensamiento inicial, la “normalidad” retornó un poco antes de que la pandemia estuviera en control aunque los casos de Covid-19 no dejan de ocurrir.
Hoy, el número de usuarios de Internet en el mundo alcanzó los 5.160 millones de personas. Internet, gracias a la pandemia, es muy importante que nunca y los centros de datos son, a un tiempo, su corazón y su latido.
Como hemos dicho, en la actualidad, estas instalaciones son cada vez más indispensables. Entre otras cosas, debido al constante incremento del uso del internet que alcanza un 64,4% de la población mundial, según el Digital Report 2023.
Luis Rugarcía, Data Center Regional Sales Manager – Nola de Vertiv señala que estas instalaciones tuvieron un gran impulso entre el 2015 y 2020 y, a causa de los acontecimientos globales vividos entre 2020 y 2022 como lo fue la pandemia.
“Este crecimiento acelerado no cesará al menos en los próximos cinco años. No es fácil hablar de números precisos de los porcentajes de aumento del uso del Internet ya que pueden variar de acuerdo al país y/o región. Muchos estudios afirman aumentos que van desde un 30% hasta un 80%”, aseguró.
Lo que está por venir
Rugarcía afirma que, a pesar de los grandes desarrollos que se han visto en América Latina en los últimos tres años en países como Brasil, México, Colombia, Chile y Argentina aún tenemos un gran potencial de crecimiento.
Esto, asegura, convierte a la región en nos un mercado muy atractivo para numerosos “hyper escaladores” estadounidenses y asiáticos, así como inversionistas globales.
Estos últimos están conscientes del potencial a explotar en Latam.
En cuanto a través ndencias, el especialista señaló que, además de la incorporación de IA y la búsqueda de mecanismos para hacer a los centros de datos más sustentables, la modularidad avanza en la región.
“Podemos citar la tendencia hacia el uso de centros de datos modulares. Hasta hace unos 10 años lo normal era la construcción estándar que involucra toda una obra civil. Actualmente los centros de datos modulares han ganado adeptos debido a la facilidad de implementación y a la rapidez con que son puestos en operación”, concluyó Rugarcía.
Destacó también como una notable innovación en la región el mayor uso de los centros de datos en el borde de la red (EDGE).