El dispositivo Kingston Fury tiene la encomienda de honrar los 35 años de historia de la empresa reconocida por sus almacenamientos portables.
No sólo de nube vive el hombre. Ni siquiera en la actualidad. Mucho menos hace una década. Dos o tres.
Es por eso que están grabadas a fuego en nuestra memoria aquellas empresas pioneras que se encargaron de hacer los datos portables cuando las computadoras no lo eran y el mundo era todo introversión: cero interconectividad.
Y, aunque ahora las nubes parecen haber resuelto el problema de la portabilidad, los dispositivos de almacenamiento siguen siendo necesarios, por ejemplo, para custodiar criptomonedas y colocarlas a salvo de los ciberatacantes que amenazan desde la darknet.
Es por ello que Kingston sigue siendo de las grandes empresas tecnológicas, más allá de los problemas que ha ocasionado la crisis de los microprocesadores.
Y, por aquello de que 35 años no son nada en un mundo donde la expectativa de vida es cada vez más alta, celebra su aniversario con un dispositivo de edición limitada.
En el Kingston FURY Beast DDR4 RGB Edición Especial el disipador de calor en color blanco con impresionante iluminación RGB hace que estos módulos sean únicos entre la línea Kingston FURY.
Edición para recordar
Así, este dispositivo de edición limitada mejora el rendimiento del sistema y lo mantiene moderno con la biblioteca de patrones y efectos de iluminación RGB preconfigurados.
O bien personaliza los ajustes para crear un estilo que, verdaderamente, destaque con el software Kingston FURY CTRL1.
Y con la tecnología Infrared Sync patentada, tus efectos RGB personalizados se mantienen sincronizados, ya sea para videojuegos, edición de video o cualquier otra actividad.
Cabe destacar que el Kingston Fury cuenta con certificación Intel XMP, ofrece avanzados tiempos, velocidades y voltajes previamente optimizados para realizar overclocking con facilidad mediante la selección de uno de los perfiles integrados.
Además de estar listo para AMD Ryzen, Kingston FURY Beast DDR4 RGB Edición Especial se integra sin esfuerzo, lo que la convierte en una actualización sencilla para cualquier sistema basado en Intel o AMD.