Algunos leemos la letra pequeña o visitamos la web de la marca para tener más información, pero muchos compramos lo que nos resulta familiar o en oferta.
Por Dr. Paul Smith, Vicepresidente de Xerox Research Centre de Canadá
Etiquetas. Las vemos todos los días en los artículos de nuestra rutina. Hay etiquetas en nuestra comida, medicina, ropa y tecnología. Éstas nos brindan información crucial que nos sirve como guía para la toma de decisiones: información nutricional de la comida que consumimos; como lavar nuestra ropa; cómo y cuándo debemos tomar nuestra medicina y advertencias que pueden salvarnos la vida sobre ciertos productos, como son químicos o medicamentos.
Pero, ¿con qué frecuencia leemos estas etiquetas? ¿Cuánta información realmente absorbemos? Para la mayoría de nosotros, la respuesta es “muy poco”.
Hoy en día, las marcas ofrecen una experiencia desconectada con el cliente. Ellos confían en nosotros, los consumidores, para tomar decisiones de compra y comprender el uso previsto de un producto al juntar la información de etiquetas, empaques y los exhibidores tradicionales de minoristas. Si bien algunos de nosotros leemos la letra pequeña o visitamos el sitio web de la marca para tener más información, muchos de nosotros compramos lo que nos resulta familiar o lo que está en oferta. Suponemos que sabemos cómo usar un producto en función de lo que hemos hecho en el pasado.
¿Pero qué pasaría si nuestras etiquetas, empaques o los exhibidores pudieran ser más inteligentes?
En lugar de leer la letra pequeña para tener más información, estos dispositivos inteligentes nos dijeran lo que necesitáramos saber.
Científicos e ingenieros de Xerox están, actualmente, investigando acerca de esa pregunta. Están llevando a cabo investigaciones innovadoras que prometen traer elementos inteligentes, tales como tecnología impresa y sensores inteligentes para producir etiquetas y empaques que revolucionarán las operaciones comerciales y ayudarán a que el “internet de las cosas” sea una realidad.
Imagina un mundo en donde una simple estantería de cartón te muestra información del producto, sus beneficios, ingredientes e incluso ofertas especiales en una pantalla en el momento que selecciones un paquete o toques un sensor. La tecnología incorporada en la pantalla detectará la señal de tu teléfono inteligente e inmediatamente te dirigirá al sitio web de la marca para obtener más información acerca del producto que seleccionaste o de productos similares que podrían ser de tu interés. Y si optás por recibir más información, la marca podría personalizar los descuentos y ofertas, incluso antes de salir de la tienda.
Esta experiencia provoca una conexión con el cliente, que incluso podría continuar fuera de la tienda. Por ejemplo, un envase de medicamentos podría recordar a los pacientes cuándo y cómo tomar su medicación. También, mandaría información directamente a la farmacia sobre cuándo se ha tomado una dosis, si el paciente necesita un resurtido o incluso, cómo se siente el paciente. Los pacientes podrían conectarse con su farmacéutico y recibir ayuda continua, y los farmacéuticos podrían monitorear el cumplimiento de la medicación y saber si es necesario ajustar el tratamiento.
Mientras tanto, la marca y los socios minoristas obtienen una mejor comprensión de cómo los consumidores se comprometen con los productos. Sabrían qué productos compran los clientes y cuáles son los que eligen pero que devuelven a la estantería. Aprenderían cuanto tiempo miran los clientes la pantalla y que información consideran como importante. Podrían usar este aprendizaje para mejorar los precios, los descuentos y las futuras pantallas interactivas.
Nuevas oportunidades estarán disponibles
Las baterías y los cables no serían un problema – estas se imprimirían directamente en la estantería y en el paquete. El montaje de las pantallas se lo realizaría en pocos minutos.
A medida que estas tecnologías se desarrollan, nuevas oportunidades estarán disponibles para los actores de la cadena de valor, desde los proveedores de impresión que crean estas presentaciones y empaques inteligentes y personalizadas, hasta los minoristas y propietarios de la marca que esperan crear una experiencia más significativa para los clientes al conectar su realidad física con el reino digital.
Lo que puede haber parecido demasiado descabellado hace una década ahora no solo es creíble, sino que también está al alcance de la mano. Con las últimas innovaciones en impresión digital, software de diseño, e inteligencia artificial. Xerox no solo está pensando en el futuro; sino que lo está haciendo.