Gamers ahora disponen en Latam de SSD más fría
La sanción retroactiva que ha recibido Claro en Colombia podría propiciar que América Móvil abandone su batalla en México.
CIO AMÉRICA LATINA | Por Elibeth Eduardo | @ely_e
Todo parece indicar que a partir de este MIÉRCOLES 16 de agosto la Suprema Corte de México fallará a favor de la empresa matriz del Grupo Slim en cuanto a su queja por la inconstitucional de que no se le permita cobrar por interconexión de otras operadoras en su red aunque, en su caso, América Móvil SI tiene que pagar cuando se interconecta.
Pero, también es probable que se deje que el IFT decida si las competidoras de la empresa deberán reembolsar todo lo que no han cancelado desde que se implantó la reforma.
De ser así, lo más probable es que el IFT establezca una tarifa (baja) para el presente y el futuro pero libere a Movistar y AT&T (las más afectadas) de un pago retroactivo que se ha estimado en unos US$ 1.050 millones.
Si se cumple este pronóstico, la decisión tanto de a corte como del regulador podrían significar una nueva queja de América Móvil por inconstitucionaliad, asimetría, inseguridad jurídica e injusticia.
No obstante, hay quienes creen que la empresa podría dejar la querella de lado para encarar la acción legal que ya ha afirmado que iniciará en Colombia.
Todo lo que diga podría ser usado en su contra
En Colombia (a diferencia de lo que ocurre en México) la retroactividad le juega en contra: el Estado como dueño anterior de la infraestructura que usan las operadoras reclama pagos desde 1994 pese a que la legislación que le daría los derechos a cobrar es de 1998.
Esto coloca a América Móvil en la posición de que los argumentos que Claro (su filial colombiana) utilice en el país suramericano podrían ser usados por sus competidores en el caso de México.
Y viceversa: que los argumentos para un pago retroactivo en su país de origen sean un “hecho notorio comunicacional” en el caso colombiano.
Cabe destacar que, en Colombia, tanto Claro (América Móvil) como Movistar (Telefónica) deberán pagar en conjunto unos US$ 1.5585 millones en penalización.
Así que el Grupo Slim quizás deba decidir en qué país prefiere ganar, sabiendo que todo lo que diga y haga en cualquiera de estos casos puede (y seguramente) será usado en su contra en el otro.
¿Atrapado? Quizás sería la primera vez
1 comentario