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El acceso a información de los clientes podría volverse cada vez más restrictivo, debido a que los usuarios cada vez se vuelven más precavidos al momento de otorgar información personal.
El reporte “The Big Data Backlash” realizado por Ernst & Young, se enfoca en la actitud de los clientes con respecto a su información y reveló que los usuarios cada vez están menos dispuestos a compartir información personal, con el 49% anticipando restrngir el acceso para el año 2018 y el 55% ofreciendo menos información personal que en los cinco años anteriores.
La cantidad de información otorgada a terceros por parte de los negocios también es una preocupación para los usuarios, con 3/4 de los encuestados mencionando que no están de acuerdo con que compartan sus datos. La información también podría verse afectada por los recientes ataques cibernéticos.
El reporte destaca que las empresas siguen dependiendo de la información de los usuarios. Al menos 62% de las empresas encuestadas dicen implementar programas de información de clientes para recolectar e implementar datos que puedan impulsar el crecimiento del negocio y el 87% mencionó que han observado un incremento en ingresos como resultado.
El 41% cree que el acceso restringido a la información de sus clientes sería un riesgo para su modelo de negocios, por lo que los negocios deben prepararse para hacer cambios en la manera en que capturan información sobre sus clientes para evitar que este valioso recurso no desaparezca.