Luego de algunos fracasos recientes en el control corporativo -con amplia repercusión en los medios-, gobiernos y organismos independientes han comenzado a imponer exigencias más rigurosas sobre Gobernabilidad, Riesgo y Cumplimiento (GRC), que van desde aspectos como reportes financieros hasta seguridad de información, retención de records y manejo de riesgo.
Por lo tanto, las organizaciones enfrentan un reto que además de complejo, es altamente dinámico: cuando no cumplen con alguna de esas crecientes regulaciones, se exponen a sanciones y altos costos adicionales.
Ante esta situación, los ejecutivos tienen que asegurar la responsabilidad e integridad de la organización adaptándose a las demandas regulatorias mientras controlan los costos, manejan mejor los riesgos y consiguen un mayor rendimiento.
En América Latina, el impacto es alto. Muchos países han incorporado en los últimos años regulaciones nuevas y cada vez más exigentes para la protección de la identidad del ciudadano y la reducción de fraudes que afectan tanto a gobiernos como a la industria financiera. Sin embargo, a la región todavía le falta incorporar todos los requerimientos y las herramientas para un control más eficiente y consistente.
La incidencia es todavía mucho mayor si se tiene en cuenta que organizaciones internacionales e instituciones financieras e industriales están considerando a la región en sus planes de inversión y expansión.
Para que las empresas públicas o privadas consigan sus objetivos y cumplan no solo con las regulaciones, sino también con la protección de su imagen o reputación, hace falta que las áreas de auditoría, riegos y/o finanzas lideren iniciativas de GRC.
Entre otras cosas, la gestión de GRC permite la implementación y ejecución de políticas internas de la empresa y el gobierno; procesos más eficientes y automatizados para ofrecer escalabilidad, disminución del riesgo y cumplimento de las regulaciones; y tecnología y herramientas que impulsan el crecimiento operativo y financiero de la empresa.
Además, el GRC controla el negocio en base al negocio, ofreciendo asignar en forma transparente sin obstruir el trabajo diario, diferenciar entre lo legítimo y las actividades fraudulentas, y prevenir que ocurran acciones fuera de las políticas y regulaciones de la empresa.
Así, las soluciones de gestión de riesgo y gobernanza financiera de GRC suministran los cimientos para mejorar la confiabilidad de la gestión y el reporte financiero, al tiempo que unifican los requerimientos y nuevas regulaciones, y manejan el riesgo en toda la empresa. Con monitoreo, evaluación y control de riesgo constante, las organizaciones pueden ajustar el rendimiento y mejorar la certeza de sus resultados comerciales.
Frente a ese escenario, en Oracle estamos comprometidos a ofrecer a nuestros clientes productos de GRC que permiten manejar con eficiencia las estrategias para administrar los riesgos. Estas soluciones evalúan todo tipo de riesgo a cualquier nivel, identifican de manera oportuna los riesgos emergentes y administran el riesgo en base al modelo y plan de negocios de la empresa o entidad gubernamental.
En sintonía con esos planes, Oracle Consulting Latinoamérica creó el equipo de Agilidad Empresarial, que trabaja con los principales ejecutivos de las empresas para identificar, colaborar e implementar soluciones que permitan reducir y manejar estos riesgos, cumpliendo con las regulaciones internas y gubernamentales.
Por Carlos Gonzalez, director de Oracle Consulting Latinoamérica