Los proveedores de Videoconferencia se esfuerzan por equilibrar la necesidad de ser más eficientes frente al inevitable aumento de la competencia de bajo costo y la erosión de precios
En los últimos años, la videoconferencia ha sido adoptada cada vez más debido a la globalización de los negocios, los beneficios de la productividad, la movilidad y la necesidad de ahorrar gastos de viaje. Durante 2010, el mercado de soluciones de videoconferencia en América Latina generó ingresos por US$78 millones y se estima que alcanzará US$294 millones en 2017, a una tasa de crecimiento anual compuesta (CAGR) de 20,9%.
Las adquisiciones realizadas durante el año 2009 se consolidaron durante el año 2010, permitiendo a los jugadores presentar ofertas más completas y competitivas. La presencia de un número limitado de participantes ha intensificado la competencia, los tres principales jugadores, conjuntamente, representaron más del 85% del mercado total en 2010. A pesar de la concentración de la industria, es esperable que los precios disminuyan en el mediano plazo, una vez que las tecnologías de videoconferencia sean más accesibles.
El mercado de videoconferencia cuenta con tres segmentos principales: las terminales, las soluciones de telepresencia y los bridges de infraestructura (MCU). En el escenario actual, las terminales representan alrededor del 65% de los ingresos totales. Sin embargo, las soluciones de telepresencia han registrado el mayor crecimiento en este mercado en América Latina, con un CAGR estimado del 27,1% desde 2010 hasta 2017. Por otra parte, es probable que la demanda de salas de conferencias y de sistemas ejecutivos de escritorio crezca entre las empresas medianas y pequeñas, que aún constituyen un segmento inexplorado.
Aunque el espectro de servicios de videoconferencia se está expandiendo en América Latina, los vendedores enfrentan aún varios retos para hacer frente a las constantes actualizaciones y cambios en las líneas de producto, además del creciente número de ofertas disponibles para los clientes. “Es extremadamente importante para los vendedores entender que soluciones deben ser posicionadas en cada segmento en América Latina. Además, deben aprender a adaptar las soluciones y el tipo de oferta proporcionada a los clientes según sus necesidades, tales como la integración con otras aplicaciones y la posibilidad de ampliar la solución como una opción modular. Ellos necesitan aumentar la conciencia existente acerca de los beneficios de las soluciones de video”, analiza Rodrigo Lima, analista de mercado de Frost & Sullivan.