Hasta ahora la apuesta de AT&T ha funcionado y la empresa ha crecido al punto de reducir sus perdidas. El punto de equilibrio es cuestión de tiempo.
CIO AMÉRICA LATINA | Por Elibeth Eduardo | @ely_e
No importan los ires y venires de la reglas del mercado de telecomunicaciones de México parece haber una verdad y una constante: hay mucho que abarcar que está desolado y eso supone que las operadoras deberán invertir más.
Más temprano que tarde, lo quieran o no. Por suerte, pareciera que la inversión está en camino gracias, en particular, a tres referentes:
- Las presiones de la OCDE para que México tenga un servicio de internet más acorde con el estándar de su organización.
- Los avances de la llamada “Red Compartida” que aspira – en mediano y largo plazo – robustecer la infraestructura en los territorios menos rentables (más alejados) del país.
- La re-asignación de parte de la Banda 2.5 GHZ para el desarrollo del servicios móviles de alta velocidad.
Sin embargo, estos aceleradores no necesariamente cambiarán las tendencias del mercado.
Es por eso que AT&T no le deja nada a a interconexión y sigue su propio plan de manera tal de que los ingresos sigan creciendo y mejoren los márgenes.
Dos dígitos
Y es que, aunque la pérdida en el flujo operativo o EBITDA reportada por AT&T México fue de US$ 109 millones durante el segundo trimestre de 2017, la misma es 20% inferior a a reportada para el mismo periodo de 2016 cuando alcanzó los US$ 139 millones.
Esto fue posible gracias a que el incremento de los ingresos de AT&T crecieron más de dos dígitos entre ambos períodos: obtuvo ingresos por US$ 665 millones, o cual superó en un 10,8% los US$ 606 millones que reportó en el mismo periodo de un año atrás.
Tal resultado se atribuyó al crecimiento del 31% en el número de usuarios totales de la empresa con respecto al año anterior.
Con la idea de mejorar estos (buenos) resultados, la empresa ha anunciado tiene en marcha la construcción de su red LTE-M, la cual le permitirá materializar una oferta dedicada al Internet de las Cosas (IoT) luego de que se concluya en diciembre de este año.
Además, la empresa abrió más de 250 nuevos puntos de venta durante abril-junio de 2017 para sumar un total de 482 nuevos sitios en el primer semestre.
No obstante, estos números no han logrado “mover” la concentración de mercado, principal objetivo de la reforma que permitió la entrada de AT&T en el mercado.
El reto de la empresa es que la empresa salga de la lista de niveles de concentración en que la acompañan países como Siria y Sierra Leona, tal como lo ha señalado a la prensa el CEO de AT&T México, Kelly King.