Kaspersky Lab interpuso una demanda por “competencia desleal” contra el antivirus y antimalware que incorpora a Microsoft en sus sistemas operativos.
CIO América Latina/Mario A. Beroes Ríos/@marioberoes22
La acusación de competencia desleal, que podría ser aplicada en la Unión Europea (UE) y la república Federativa de Rusia, sede y lugar de nacimiento del CEO de esta empresa de ciberseguridad, Eugene Kaspersky, podría convertirse en una investigación formal contra la empresa estadounidense, basada en el estado de California.
Para muchos entendidos en el área legal, la demanda por competencia desleal no debería prosperar ya que es un antivirus gratuito e integrado en el sistema operativo, por lo que el Windows Defender no perjudica las ventas de soluciones de seguridad de terceros.
Sin embargo, el fundador de la firma rusa, ha ido con todo contra Microsoft y acusa a la compañía de “jugar sucio” y aprovechar su posición de dominio en Windows 10 para forzar a los usuarios a abandonar las soluciones de seguridad alternativas, lo que en su opinión es un claro ejemplo de competencia desleal.
Según el comunicado emitido por Kaspersky, Windows 10 deshabilita el software de seguridad, que en opinión de sus técnicos es incompatible al instalar actualizaciones del sistema operativo y los reemplaza con Windows Defender.
Lo que el usuario no sabe, asegura la empresa rusa de ciberseguridad, “es que Microsoft da a los desarrolladores sólo una semana para probar sus soluciones de seguridad y hacerlos compatibles con las nuevas versiones del sistema operativo, como sucede con la nueva versión Windows 10 RTM“.
“Como resultado de estas acciones, la situación que ha creado Microsoft hace que los fabricantes de software de seguridad que son su competencia, incluyendo Kaspersky Lab, no puedan cumplir las obligaciones adquiridas con sus usuarios; lo que supone que los usuarios están menos protegidos, que su libertad para elegir la solución de seguridad está limitada y, además, ocasiona pérdidas económicas a los competidores de Microsoft”.
¿Una relación que termina?
Kaspersky Lab y Microsoft han mantenido una larga y exitosa trayectoria como socios. Después de meses de negociaciones infructuosas y de múltiples opciones planteadas para resolver esta situación directamente con Microsoft, Kaspersky Lab decidió recurrir a los organismos legales de varios países en Europa, en particular ante la Comisión Europea y actualmente están preparando la aplicación.
Esto ayuda a aumentar la base de usuarios de Windows Defender en un sistema con Windows 10, dice Kaspersky, que también se queja de otra restricción acerca de sus certificados que expiran en los primeros tres días después del vencimiento de una alerta.
“Cuando se cumple la licencia del antivirus la notificación sólo se muestra en el Centro de seguridad de Windows, y nadie lo ve, por lo que Microsoft desactiva el AV existente y activa Windows Defender”.
Incluso si un antivirus está actualizado, instalado y ejecutado correctamente en un equipo, Windows Defender aparece de vez en cuando para mostrar una advertencia que anima a los usuarios a activarlo y desinstalar esa protección de terceros, aseguran desde la firma de seguridad rusa.
La firma rusa explica que varias empresas de seguridad se han quejado de todo esto, pero nadie ha tenido el valor para decirlo públicamente.