Chile es el segundo país de Latinoamérica que más ciberataques sufrió durante 2015. Solo lo supera en este renglón Brasil.
70% de las compañías en el mundo son víctimas de delitos informáticos, donde el “phising” o suplantación de identidad es el que más se repite. Para prevenir o minimizar estas cifras, que tantos problemas causan a las empresas en Chile, Ricardo Ibarra, gerente comercial de SIS en Proseguir, explica que la empresa decidió “implementar un servicio de seguridad que pueda entregarle a nuestros clientes soluciones integrales de seguridad, acordes a sus necesidades y debido a la gran cantidad de delitos de este tipo que se originan en esta zona”.
Añade Ibarra que las compañías, sin importar su tamaño, sufren delitos informáticos cada 1,5 segundos y pueden demorarse en promedio más de 6 meses en detectar que han sido atacadas, “por lo que colocamos en el mercado nuevas soluciones de ciberseguridad”.
“Las empresas en Chile al ser atacadas podrían tener gravísimas consecuencias como la pérdida de información confidencial, comercial, bases de datos de clientes e incluso puede llegar a afectar la reputación de la marca, por lo que este servicio les entregará a las compañías la tranquilidad de estar protegidos a través de tres frentes, conocidos como seguridad lógica, vigilancia digital y ciberinteinteligencia”.
Añade que en la seguridad lógica “nuestros servicios tratan de minimizar los riesgos y vulnerabilidades de los sistemas; protegiendo la información y los activos más importantes de las empresas. Esto es fundamental si se sabe que durante los últimos 12 meses el 70% de las empresas alrededor del mundo han sufrido algún tipo de delito informático”.
Vigilancia digital en empresas en Chile
Por su parte, la vigilancia digital es otro de los frentes por los cuales Prosegur combate los ciberataques, el que consiste en la monitoreo continuo de fuentes abiertas en Internet, distintas webs, foros, blogs o redes sociales, para buscar cualquier dato o noticia que pueda suponer una amenaza contra la empresa, con el fin de realizar la detección temprana y poder recomendar acciones preventivas.
Ibarra, además comenta que cuentan con un servicio adicional de ciberinteligencia ya que “muy pocas ciberamenazas se originan en las fuentes abiertas, por lo que las empresas necesitan una monitorización continua de fuentes ocultas y redes anónimas en la ‘Deep Web’, previniendo así la fuga de información y pudiendo identificar cualquier suplantación, eliminando sitios web fraudulentos vinculados a las compañías y actuando frente a phising, malware o cualquier otro tipo de delito cibernético riesgoso”.