Uno de los gigantes de la tecnología, Apple, no termina de levantar cabeza. Detrás de sus cifras sin parangón, hay un enorme problema que la directiva pareciera no saber enfrentar. China, el mercado clave para el crecimiento reciente de la empresa, ha pasado de ser una fortaleza a una debilidad.
CIO América Latina| Mario Augusto Beroes Ríos| @marioberoes22
La desaceleración de su economía parece un hecho y los inversores esperan que esto pronto se traslade al negocio tecnológico. Esto, por supuesto, tiene con las manos en la cabeza al CEO de Apple, Tim Cook, quien ya ya ha hecho varias visitas de negocios a China, pero ahora supuestamente buscaría solventar las recientes crisis de la empresa de la manzana en el gigante asiático.
El volumen de ventas en China se duplicaron en su último ejercicio fiscal (de octubre de 2014 al mismo mes de 2015), hasta situarse cerca de 59.000 millones anuales. El país oriental supuso una cuarta parte (24%) de todo el negocio de Apple, superando en importancia al mercado europeo (20%). Sin embargo, China es ahora la principal incertidumbre para la compañía y cualquier noticia relativa a sus planes de producción allí se resuelve con amplias fluctuaciones en bolsa para la empresa que preside Tim Cook.
Como una montaña rusa
La situación ha cambiado, y una importante caída de ventas e ingresos en China, debido a múltiples razones, como son la saturación del iPhone en la región y un mayor crecimiento por parte de marcas chinas como Huawei, Oppo, Xiaomi y otras, está acorralando cada vez más a Apple.
Además se une a todo esto el hecho de que el gobierno chino haya decidido prohibir los servicios de ventas online de libros y vídeos de Apple, algo que limita no sólo los ingresos de la empresa, sino también la funcionalidad de sus dispositivos.
Los abogados de Apple además aseguran que China ha pedido a la compañía su código fuente durante dos años, y que se han negado siempre a proporcionarlo para salvaguardar los intereses de los usuarios, mientras que los rumores aseguran que habría llegado a algún acuerdo con el gobierno que habría facilitado su penetración en el mercado chino.
En cualquier caso, parece que Tim Cook volverá a visitar China con la intención de tratar de solucionar los problemas de la compañía en la región, al menos en lo referente a regulaciones y prohibiciones. La pregunta es si logrará sus objetivos.