El Sistema de Posicionamiento Global GPS, (por sus siglas en inglés), cumplió 20 años de servicio al mundo y ha demostrado su eficiencia en todos los ámbitos donde se ha utilizado.
Este sistema consiste en un grupo de 24 satélites que ubica el lugar en el que se encuentran las personas y que está incorporado en prácticamente todos los teléfonos inteligentes. Algo impensable hace dos décadas.
En principio, el GPS era de uso estrictamente militar. Su historia está ligada a la Guerra del Golfo (1990), en la que los bombarderos estadounidenses lo usaron para ubicar el sitio en el cual atacar.
En algunos países, estos GPS son utilizados en brazaletes que portan quienes padecen autismo o alzhéimer y permiten la ubicación de ellos en caso de que desaparezcan.
Sin embargo, dentro de unos años este dispositivo podría ser reemplazado por la brújula cuántica, en la que se trabaja en el Reino Unido.
Y nadie apostó por ellos
Los GPS usan una red de satélites que orbitan la tierra y envían señales de vuelta para encontrar ubicaciones exactas con toda precisión. Esos satélites han sido supervisados por el gobierno de los Estados Unidos entre otros.
Sin embargo, un estudio reciente reveló que la falta de inversión en los satélites junto con una administración descuidada podría ver que el sistema colapse, causando fallas o información y direcciones erróneas que se están usando. “Es incierto si la Fuerza Aérea será capaz de adquirir nuevos satélites a tiempo para mantener el actual servicio de GPS sin interrupción”, dice un reporte de la Fuerza Aérea de los EE.UU., a pesar del hecho que se están invirtiendo $2 mil millones en el sistema.
“Si no, algunas operaciones militares y ciertos usuarios civiles podrían verse afectados negativamente. En años recientes, la Fuerza Aérea se ha esforzado para construir exitosamente satélites GPS dentro del costo y objetivos fijados. Encontró problemas técnicos significativos … (y) lidió con diferentes contratistas”, añade el reporte.
1 comentario