EMC publicó hoy los resultados del Índice de Privacidad de EMC, un estudio global cuyo objetivo es evaluar las actitudes de los consumidores con la privacidad en línea. El estudio revela que los usuarios tienen puntos de vista en relación con la privacidad que varían en gran medida según la región y el tipo de actividad en la que participen en línea.
El debate sobre cuánta visibilidad en el mundo digital de sus actividades, comunicaciones y comportamientos privados de las personas que pertenecen a los gobiernos y empresas continúa. En ese sentido, el Índice de Privacidad de EMC explora qué tan dispuestos están los usuarios a renunciar a los beneficios de la tecnología, por defender y garantizar su privacidad.
¿Cuál es la conclusión? Las personas quieren los beneficios de la tecnología sin sacrificar su privacidad. Sin embargo, se destacaron tres paradojas de la privacidad, cada una con un impacto importante en los consumidores, las empresas y los proveedores de tecnología:
- La paradoja de querer todo: los consumidores dicen que quieren todas las comodidades y los beneficios de la tecnología digital, pero dicen que no están dispuestos a sacrificar su privacidad para obtenerlos.
- La paradoja de la inactividad: aunque los riesgos de privacidad afectan directamente a muchos consumidores, la mayoría dice que prácticamente no toma medidas especiales para protegerla, y consideran que la responsabilidad corresponde a quienes manejan su información, como el gobierno y las empresas.
- La paradoja de compartir en redes sociales: los usuarios de redes sociales dicen valorar su privacidad, pero comparten libremente grandes cantidades de datos personales, a pesar de que desconfían de que esas entidades protegerán su información.
El Índice de Privacidad confirma que las personas se conducen de forma distinta según el tipo de actividad, lo cual puede categorizarse en varias identidades en línea (o varios “yo”), cada una con una actitud distinta con relación a la privacidad. Las seis identidades evaluadas incluyen:
- El yo social: interacción con redes sociales, programas de correo electrónico, texto/SMS y otros servicios de comunicación
- El yo financiero: interacción con bancos y otras instituciones financieras
- El yo ciudadano: interacción con instituciones gubernamentales
- El yo médico: interacción con doctores, instituciones médicas y aseguradoras de salud
- El yo empleado: interacción con sistemas y sitios web relacionados con el empleo
- El yo consumidor: interacción con tiendas en líneas
Los puntos de vista en relación con la privacidad varían en gran medida según la identidad. Por ejemplo, en relación con su identidad ciudadana, los encuestados se mostraron más dispuestos a sacrificar su privacidad, para obtener protección o tener un acceso más fácil y eficiente a los beneficios del gobierno. Por el contrario, su identidad “social” es la menos dispuesta a sacrificar su privacidad por estar más conectados socialmente.
El estudio es interesante para los consumidores, las empresas y los proveedores de tecnología.
- Para los consumidores, respalda la necesidad de incrementar su conciencia sobre los problemas de privacidad y de tomar medidas personalmente para proteger su privacidad. Haga clic aquí para ver las recomendaciones de EMC sobre pasos que puede tomar para mejorar su privacidad como consumidor.
- Para las empresas, lo más importante es comprender la gama de percepciones de los clientes. Las empresas que demuestren las prácticas de privacidad más relevantes y sencillas para sus clientes se verán beneficiadas en gran medida. Cuanto más evidente sea que una empresa está comprometida con la protección de la privacidad, más probable será que atraiga e incremente sus niveles de participación de los consumidores.
- Los proveedores de tecnología son fundamentales para ayudar a las empresas a hacer realidad su compromiso con la protección de la privacidad, y deben encontrar formas de mejorar la privacidad en todas sus ofertas son comprometer la experiencia del usuario, el rendimiento o las capacidades.
Conclusiones clave
La paradoja de quererlo todo
- Independiente de la identidad y el tipo de beneficio, las personas están muy poco dispuestas a sacrificar su privacidad por los beneficios de la tecnología digital:
o El 91% de los encuestados valoran el beneficio de “acceso más fácil a información y conocimientos” que les brinda la tecnología digital.
o Solo el 27% dicen estar dispuestos a sacrificar privacidad para obtener una mayor facilidad y comodidad en línea.
o El 85% de los encuestados valoran “el uso de tecnología digital para la protección frente a actividades terroristas y/o criminales”; no obstante, solo el 54% está dispuesto a sacrificar algo de su privacidad para recibir esta protección.
o Los encuestados mayores de 55 años de todos los países dicen que están menos dispuestos a sacrificar privacidad por conveniencia y desean más control sobre sus datos personales.
La paradoja de la inactividad
- La mitad de todos los encuestados informaron haber sufrido una violación de la seguridad de los datos (cuenta de correo electrónico atacada, dispositivo móvil perdido o robado, cuenta en una red social atacada y más). Muchos no están tomando medidas para protegerse:
- El 62 % no cambian sus contraseñas con regularidad.
- 4 de cada 10 no personalizan la configuración de privacidad en las redes sociales
- El 39 % no usan protección mediante contraseña en dispositivos móviles.
- Los encuestados enumeraron el uso, la venta o el intercambio de datos personales para obtener ganancias por parte de las empresas (51 %) y la falta de atención del gobierno (31 %) entre los mayores riesgos para el futuro de la privacidad. Asimismo, la opción “falta de cuidado y atención por parte de las personas normales como yo” apareció muy abajo en la lista (11 %)
- Una muestra de personas mayores de 55 años demostró que hay muchas menos probabilidades de que protejan sus dispositivos móviles mediante contraseña o cambien la configuración de privacidad en sus redes sociales.
Paradoja de compartir en las redes sociales
- El uso de redes sociales continúa incrementándose, a pesar de que:
- Los encuestados anticipan que su privacidad en las redes sociales será más difícil de mantener en los próximos cinco años;
- Los consumidores consideran que las habilidades y los valores éticos de las instituciones para proteger la privacidad de los datos personales en redes sociales son bajas;
- Apenas el 51 % dice confiar en las habilidades de estos proveedores de proteger sus datos personales, y apenas el 39 % dice confiar en la ética de esas organizaciones;
- La gran mayoría de los consumidores (84 %) dicen que no les gusta que nadie sepa nada sobre ellos o sus hábitos a menos que ellos mismos decidan compartir esa información;
- Un muestro de los encuestados de más de 65 años demuestra que están considerablemente más preocupados sobre su privacidad y son quienes menos dispuestos están a dejar que otras personas se enteren de sus hábitos en línea;
Una perspectiva escéptica sobre la privacidad global
- La confianza de las personas en sus niveles de privacidad se degrada con el tiempo
o En comparación con un año atrás, el 59 % de los encuestados de todo el mundo sienten que ahora tienen menos privacidad
- En Brasil y los Estados Unidos se encuentra el mayor porcentaje de encuestados que dicen sentir que tienen menos privacidad ahora, con un 71 % y 70 %, respectivamente.
- Francia es el único país con una mayoría (56 %) que no está de acuerdo con la afirmación de que tienen menos privacidad ahora que hace un año.
- Una gran mayoría de los encuestados (81 %) anticipa que la privacidad disminuirá en los próximos cinco años.
Estos resultados sugieren que es probable que los consumidores participen en más actividades en línea con instituciones que demuestren mayor protección de su privacidad. Esto presenta oportunidades genuinas que las empresas y los gobiernos no deben ignorar.
Francisco Carrasco, CIO America Latina