Grabar videos y subirlos al servicio de alojamiento de Google se ha convertido en algo muy habitual para muchos. Pero además de un hobby podemos hacer de esta casi rutina una vitrina y negocio profesional.
Youtube se ha convertido en prácticamente un medio de comunicación entre clientes y la comercialización de productos. Y es que cada vez son más las empresas que aprovechan los vídeos de este sitio para promocionarse. Para algunos negocios puede que no sea una vía natural publicitaria, sin embargo, cada vez está más aceptado que proyectos de todo tipo se lancen a través de ésta plataforma.
Sea cual sea el negocio a explotar una de las claves para sacarle partido en forma de video es crear grabaciones con sentido del humor pero que encierren la esencia de nuestro producto, y a poder ser a base de historias verdaderas. De hecho, los vídeos divertidos y originales son los que más visitas despiertan en Youtube, sobre todo por la noche. Así que, ya seamos propietarios o trabajadores de un restaurante de comida para llevar o de una tienda de bicicletas, podemos hacer de lo cotidiano una comedia, para atraer a nuevos clientes a base de carcajadas.
No obstante, siempre será más dinámico un vídeo divertido que una presentación de PowerPoint. Para empezar a confeccionar un vídeo de éstas características lo más recomendable es hacerlo en un ambiente relajado y pensando qué es lo que nos hace reír y qué puntos pueden potenciar nuestro negocio.
Sin embargo, si preferimos optar por una opción más seria, podemos dejar a una lado la comicidad y centrarnos en buscar cómo explicar a través de un vídeo la funcionalidad del producto, sobre todo si se trata de artículos como un botiquín de primeros auxilios, donde las bromas tienen escasa o nula cabida.
Otro aspecto a tener en cuenta a la hora de elaborar el vídeo es pensar en la audiencia a la que nos dirigimos. Aunque algunos expertos aseguran que no se elige al público, qué es el público el que elige a la empresa. No obstante, Youtube ofrece datos demográficos sobre los espectadores de algunos vídeos, e incluso podemos ayudarnos de los criterios de Google Analytics.
Una vez que hayamos definido el vídeo temáticamente, es el momento de escribir el guión y de empezar a garbar. Si la calidad no es demasiado buena, o el aspecto no resulta muy profesional, no hay por qué preocuparse pues son los vídeos virales, y en la mayoría de la ocasiones grabados con medios limitados, los que más acogida suelen tener. Respecto a la duración, unos 90 segundos es el tiempo estimado como adecuado.
Antes de publicarlo es recomendable que esté bien editado, y que el lanzamiento se realice a través de un canal propio. Finalmente, quedaría el aspecto promocional, cuanta más difusión tenga a través de las redes sociales más posibilidades habrá de que la gente lo vea y comience a hacerse conocido.