Puede que en América Latina aún estemos lejos de las ciudades inteligentes y autosustentables. Pero mejorar el tránsito es posible. Y hasta indispensable.
Por William Peña | Vía PC World en Español
Quizás los ciudadanos de San José de Costa Rica no sientan que el tráfico de su capital sea el principal problema de sus vidas aunque, seguramente, piensen que es susceptible de mejora.
Pero para quienes viven o trabajan en Ciudad de México, Sao Paolo, Buenos Aires, Bogotá o Caracas cualquier mejora significativa en el tránsito es directamente proporcional a la mejora en la calidad de su vida cotidiana.
Incluso, un estudio reciente del directorio de Transporte Público Metropolitano (DTPM ) de Santiago de Chile reveló que los viajes críticos, es decir, de una hora o más de duración:
• Constituyen el 37% de los desplazamientos en la ciudad.
• Esto representa 10 puntos más de los obtenidos por la misma categoría en 2015.
• Representa un 19% de incremento (casi una quinta parte) en un año.
Esto significa problemas de productividad para alas empresas y el Estados, así como menos tiempo de calidad para el disfrute, deporte, entretenimiento o familia.
Y, como vemos, la cifra de “víctimas” de viajes críticos sigue creciendo.
Tecnología para la gente
Por fortuna es creciente el uso de la tecnología para resolver este tipo de problemas y lograr mejoras sustanciales en los mismos. Requiere de recursos y de cierta experticia, no ocurre de la noche a la mañana pero las nuevas escuelas de urbanismo y tránsito tienen en las TI nuevos aliados para su trabajo en el beneficio de los habitantes y transeúntes de las ciudades.
En esa línea, la gente de Axis Communications, pone en el tapete algunas de las tecnologías que están mejorando el tránsito y que lo harán en los próximos años. Conoce algunos:
1. Lectura de placas. La lectura o el reconocimiento de placas es una herramienta capaz de identificar vehículos que no cumplan con una exigencia, como autos no verificados que pueden contaminar el ambiente en niveles fuera de los estándares. También es posible crear un cinturón en áreas específicas, como el centro de una ciudad, para que solamente los autos de quienes viven allí puedan circular en determinados días.
2. Control de semáforos. En un cruce, los semáforos pueden operar para que el tránsito fluya de manera más inteligente. Las cámaras de videomonitoreo pueden, además de registrar las calles con fines de seguridad, estar conectadas a los semáforos y actuar como sensores que detectan la presencia de vehículos y controlan el semáforo de acuerdo con el volumen de los vehículos. Si no hay más coches circulando, la señal se cierra en esa vía y se abre en la otra, donde ya se acumulan algunos vehículos.
3. Carriles exclusivos. En algunas avenidas, hace todo el sentido crear carriles exclusivos para autobuses y taxis, o dejar que los camiones circulen solamente en las franjas de la derecha, o incluso crear pistas para motos y bicicletas. Toda esta organización puede ser verificada por las cámaras, en horarios determinados por los agentes de tránsito. La regla, por ejemplo, puede ser válida solamente en algunos horarios.
4. Estudios de tráfico. ¿Cuál es el flujo de vehículos en una determinada avenida?, ¿circulan por allí muchos autobuses y camiones?, ¿Sería mejor que el sentido fuera invertido?, ¿cuál es el mejor horario para realizar obras en una calle específica?. Estas y otras cuestiones dependen del conocimiento sobre el flujo en la región y ese conocimiento puede estar basado en datos concretos. Las calles más estratégicas pueden contar con estadísticas detalladas del número de vehículos a cada minuto para acciones de corto plazo o para un planeamiento más estratégico.
5. Monitoreo remoto. Muchas ciudades que ya poseen cámaras IP de alta resolución para apoyar la seguridad están usando los mismos equipos para verificar el cumplimiento de reglas de tránsito, aunque no haya un agente cerca. En caso de que un vehículo estacione en un lugar prohibido, como en una calle concurrida obstaculizando el tránsito, el agente en la central de control puede dar zoom, verificar la placa y emitir una multa. Además, las cámaras pueden detectar automáticamente cuando ocurre un accidente y dar una alerta inmediata a los gestores de tránsito. Esto reduce el tiempo de interrupción de la vía.