Sophos X-Ops anticipa fraudes ejecutivos potenciados por inteligencia artificial y filtraciones internas amplificadas por automatización.
El panorama de ciberamenazas evoluciona a velocidad exponencial. Mientras cerramos 2025, los analistas de Sophos X-Ops proyectan un escenario para la ciberseguridad donde la inteligencia artificial se convierte en el principal multiplicador de ataques dirigidos contra organizaciones globales.
Rafe Pilling, Director de Inteligencia de Amenazas de Sophos X-Ops, identifica cinco vectores críticos que definen el presente: agentes occidentales impulsando ransomware, ataques escalonados a cadenas de suministro digital, experimentación criminal con GenAI, infiltración de trabajadores tecnológicos norcoreanos y la amenaza persistente china. Este contexto prepara el terreno para disrupciones mayores.
El retorno de errores evitables
La predicción más inquietante de Pilling resulta paradójica: un ciberataque masivo en 2026 será completamente prevenible. La causa raíz no será tecnología sofisticada sino higiene cibernética deficiente. Contraseñas débiles, actualizaciones postergadas, configuraciones predeterminadas y capacitación insuficiente seguirán siendo la puerta de entrada para intrusiones devastadoras.
Esta realidad subraya una brecha persistente entre capacidad defensiva disponible y disciplina operacional implementada. Las organizaciones cuentan con herramientas robustas, pero la ejecución inconsistente de protocolos básicos mantiene ventanas de vulnerabilidad abiertas.
Deepfakes corporativos: cuando la voz miente
La clonación de voz mediante IA generativa trascenderá el ámbito experimental para convertirse en arma táctica contra procesos empresariales críticos. Los atacantes falsificarán identidades en aprobaciones financieras, restablecimientos de contraseñas y validaciones de proveedores mediante síntesis vocal indistinguible de originales humanos.
Esta amenaza desplaza la ingeniería social tradicional basada en correo electrónico y códigos QR hacia canales de voz en tiempo real, donde la confianza se establece mediante reconocimiento auditivo instantáneo. La combinación resulta letal: urgencia temporal más validación sensorial falsa.
Pilling advierte sobre fraudes a ejecutivos orquestados mediante conjuntos de agentes de IA que localizan grabaciones públicas de CEOs, generan videos deepfake siguiendo guiones específicos y ejecutan llamadas interactivas por WhatsApp. El protocolo incluiría mensajes de video iniciales del director ejecutivo antes de transferir la conversación al chat textual, agregando capas de autenticidad percibida.
Riesgos internos amplificados
Las filtraciones no provendrán únicamente de actores maliciosos deliberados. Empleados utilizando herramientas GenAI para aumentar productividad expondrán datos sensibles mediante conectores mal configurados, fugas informativas e integraciones ocultas en plataformas de terceros.
Este vector representa un cambio fundamental: la amenaza interna deja de ser principalmente intencional para volverse accidental pero sistemática. La adopción masiva de asistentes de IA sin marcos de gobernanza claros crea superficies de ataque expandidas que las organizaciones apenas comienzan a mapear.
Corea del Norte intensifica operaciones
El régimen norcoreano podría perpetrar un robo de criptomonedas superior a los 1.500 millones de dólares sustraídos de ByBit. Paralelamente, sus trabajadores tecnológicos infiltrados implementarán IA agentic para mejorar la longevidad de perfiles falsos, incrementar capacidad de respuesta ante solicitudes remotas y ejecutar tareas con mayor efectividad.
Esta doble estrategia combina objetivos financieros inmediatos con posicionamiento estratégico a largo plazo dentro de infraestructuras tecnológicas occidentales.
Fragmentación del ransomware
El mercado de ransomware continuará como amenaza primaria pero con transformación estructural: fragmentación acelerada y participación creciente de grupos angloparlantes y chinos, diluyendo el dominio histórico de actores rusófonos.
Esta diversificación geográfica y lingüística complica atribución, negociación y respuesta coordinada, mientras amplía la base de talentos criminales disponibles.
Difuminación del MDR
Tom Gorup, VP de Operaciones SOC en Sophos, anticipa que los servicios de Detección y Respuesta Gestionadas alcanzarán un punto crítico donde clientes no distinguirán entre servicio humano y herramienta automatizada. Proveedores comercializarán software como MDR completo, utilizando IA para compensar profundidad humana limitada.
Esta ambigüedad erosionará confianza: los compradores no sabrán dónde termina juicio humano, qué está automatizado ni quién supervisa realmente su seguridad las 24 horas. El sector deberá redefinir si MDR permanece como servicio, herramienta o híbrido indefinido.
John Peterson, Chief Development Officer de Sophos, resume el panorama: la IA facilitará weaponización de vulnerabilidades conocidas, orquestación de campañas, reducción de barreras para hackeo básico y explotación masiva en internet. Las cargas útiles se personalizarán con velocidad sin precedentes.
Los defensores enfrentan una encrucijada: replantear controles de identidad, establecer gobernanza rigurosa de IA y mitigar riesgos internos antes que la reinvención constante de adversarios convierta 2026 en año de disrupciones mayúsculas.







