La exposición Science Gallery Monterrey constituye una aproximación innovadora para crear el arte y la ciencia.
La galería forma parte de la red internacional de Science Gallery Network, y es el primer espacio físico en su tipo en América Latina.
La convergencia entre el arte y la tecnología suele verse como una paradoja. Es un prejuicio difícil de explicar.
Después de todo, hasta la producción de colores y texturas del Renacimiento constituía una tecnología.
Otro tanto puede decirse de la imprenta: una tecnología que, si duda, cambió la historia y transformó la literatura para siempre.
La exposición Brave New Future, que se estará presentando en la Science Gallery Monterrey hasta el próximo mes de julio es un ejemplo reciente de la riqueza de oportunidades que ofrece está convergencia.
La sola ubicación es, en sí misma, una convergencia. La galería está ubicada en la entrada del edificio EXPEDITION FEMSA, una plataforma de conexión entre investigadores, emprendedores e industria que forma parte del Distrito de Innovación Monterrey.
Además, para su exposición inaugural, se abrió una convocatoria internacional, para la cual se invitó a artistas, diseñadores e investigadores de todo el mundo a presentar diferentes perspectivas sobre cómo podemos visualizar el mañana.
“Este espacio tiene un doble propósito: el despertar la curiosidad en nuestros estudiantes en las ciencias y en las artes para resolver los retos de innovación y emprendimiento”, explicó el director de Science Gallery Monterrey, Miguel González Virgen.
Convergencia y transformación
Luego de la convocatoria, con las 202 propuestas recibidas de participantes de 47 nacionalidades, un panel curatorial conformado por cuatro expertos en artes y ciencia seleccionó las obras finalistas que se presentan en la actual exposición.
Para González Virgen, la exposición Brave New Future de la Science Gallery Monterrey también espera ser un catalizador de la creatividad en el edificio.
“Confiamos en que, cuando nuestros investigadores y científicos vean estas obras, sientan un impulso a crear, a despertar nuevas ideas y formas de ver las cosas”, reiteró Miguel González Virgen, director de Science Gallery Monterrey.
Aseguró también que las exploraciones presentes en Brave New Future permiten imaginar un porvenir más esperanzador que los escenarios apocalípticos prevalentes en la cultura actual.
Además, los creadores de estas piezas también nos alertan sobre los temas más urgentes que las sociedades deben resolver:
- “Phytopoiesis” del colectivo “Scenoscome” (Francia) y “Voice in My Head” de Laureen McCarthy y Kyle McDonald (EE.UU.) utilizan la inteligencia artificial para mejorar la interacción con el ambiente natural y con nosotros mismos.
- “Kyrallysis” de Gilberto Esparza (México) y “Corals” de Marco Barotti (Italia) abordan el medio ambiente y la salud de los mares.
- “Speculative Evolution” del equipo de Marc Lee (Suiza) y Shervin Saremi (Irán) invita a diseñar nuevos ecosistemas y especies.
- “Catalog for the Post Human” de “Parson & Charlesworth Studio” (Reino Unido/Canadá) presenta productos de ciencia ficción que invitan a reflexionar sobre el futuro.
Impactos crecientes
Basada en el modelo pionero de Science Gallery del Trinity College de Dublín que inició en 2008, la galería propiciará la colaboración entre científicos y artistas.
Ello permitirá desarrollar programas educativos innovadores y potenciar la excelencia de la investigación llevada a cabo por el Tecnológico de Monterrey y las demás universidades de la red Science Gallery.
Para la coordinadora de exposiciones de Science Gallery Monterrey, Carmen Ruiz Espinosa, las obras seleccionadas para esta exposición invitan a hacer conciencia sobre cuál es nuestro lugar como seres humanos en él.
La especialista recordó que la nueva sede, ubicada en el Campus Monterrey del Tec, es la más reciente incorporación a la red internacional de Science Gallery Network.
También es el primer espacio físico en su tipo en América Latina. Actualmente cuenta con sedes en Dublín, Irlanda; Londres, Inglaterra; Melbourne, Australia; y Bangalore, India; así como temporales en Atlanta, Estados Unidos, y Berlín, Alemania.
“Realmente se trata de reunir el arte y la ciencia. Pero, particularmente, permite ser un catalizador para la innovación y un espacio donde el público, en especial la gente joven, pueda interactuar con investigación innovadora de las universidades”, señaló Sarah Durcan, directora ejecutiva de Science Gallery International.